Un curso de verano para que lxs jóvenes alcancen el sueño cósmico en compañía de Katya Echazarreta

Por: Redacción
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Tras viajar en un cohete y convertirse en la primera mexicana en sobrepasar el cielo, Katya Echazarreta sueña con llevar a México al espacio con un campamento aeroespacial

Por Eduardo Alavez*

Viajar al espacio. En la historia de la humanidad, sólo lo han hecho 500 personas y de esas sólo unas 60 han sido mujeres. En esta reducida cifra está Katya Echazarreta, la primera mexicana en lograrlo.

Katya nació en Guadalajara. Cuando era niña, se mudó a San Diego con su familia, estudió ingeniería eléctrica en la Universidad de California, en Los Ángeles, y logró entrar a la NASA como becaria… ahí empezó su sueño cósmico.

En 2022, la joven ingeniera en electrónica, astronauta y divulgadora científica viajó al espacio junto a otros cinco tripulantes como parte de la misión Blue Origin NS-21. Un pequeño paso para la jalisciense, un gran salto para México.

Sin caer en el discurso de la meritocracia, para lograr esta hazaña se necesita hambre y Katya la tiene, pues fue elegida de entre una lista de más de 7 mil solicitantes. La idea de convertirse en astronauta no vino de la ciencia ficción.

En Katya, la semilla de ir a conocer los rincones del Universo se plantó cuando fue a un campamento para niñxs de un museo en Estados Unidos. Tras años de estudio, el 4 de junio de 2022 consiguió cortar el listón de la meta al sobrepasar el cielo en un cohete de Blue Origin, la empresa del magnate de Amazon, Jeff Bezos.

Un campamento aeroespacial en México

Katya sabe que para lograr que la industria espacial despegue en México hay que empezar por sembrar esa semilla en las infancias. Por eso creó un campamento aeroespacial que busca inspirar a jóvenes.

“Me di cuenta de la realidad para muchas personas en Latinoamérica. Estos programas, estas oportunidades, simplemente no existen y de ahí nació esta idea de crear este entrenamiento aeroespacial”, mencionó en entrevista. 

En 2024 será la segunda edición de este curso de verano completamente gratuito. La primera fue en Guadalajara, pero ahora se expandió y las sedes serán tanto en la Ciudad de México como en Morelos.

Serán 100 jóvenes de entre 13 y 17 años lxs afortunadxs para disfrutar de esta experiencia durante el verano. Las y los tripulantes aprenderán sobre la industria aeroespacial a través de varias actividades, como una misión análoga a un cuerpo celeste; además, podrán usar un traje de astronauta.

El registro para el Campamento Aeroespacial quedará abierto a partir de este viernes 26 de abril a las 11:00 horas desde la página web de la Fundación Espacial Katya Echazarreta (/www.fundacionespacial.com). En esta ocasión habrá cuatro campamentos a desarrollarse del 8 al 19 de julio; cada semana se habilitarán dos de forma simultánea con 25 tripulantes cada uno. Además, la convocatoria es internacional.  

También, Katya y su fundación han estado cerca del Congreso de la Unión para incentivar reformas que prioricen el desarrollo de la industria espacial en México y faciliten la creación de bases para el estudio y viajes fuera de nuestro planeta:

“Estamos trabajando todos los días para poder crear la legislación necesaria y abrir las puertas para una industria espacial en México, es decir, crear todo lo necesario para que, cuando estos trabajos en el futuro estén disponibles, las personas ya tengan las experiencias y puedan entender todo lo que existe”, comentó.

Echazarreta reconoce que hoy en día, las y los jóvenes de México no piensan en estudiar para llegar a la NASA ni mucho menos viajar al espacio. La razón, advirtió, es porque nunca han existido condiciones para cumplir ese sueño.

“Entiendo que es muy difícil de creer. Yo lo entiendo y lo vivo todos los días, pero eso también ha sido algo muy importante para nosotros porque, al terminar este programa, queremos que lxs jóvenes realmente sientan que esto es algo a lo que se pueden dedicar”, concluyó.

Otra meta espacial

A principios de este año, la Agencia Espacial Mexicana arrancó el Proyecto Colmena, la primera de tres misiones a la Luna para realizar antes del 2030. En este lanzamiento a bordo del Peregrino 1 (el primer módulo privado de la NASA) se incluyeron cinco microrrobots mexicanos; sin embargo, el alunizaje no se completó por una falla en el sistema de propulsión. La presidenta de la Cámara de Senadores, Ana Lilia Rivera, dijo que no se le podía considerar un fracaso debido a que aún faltan dos lanzamientos más por llevarse a cabo.  

*Texto adaptado para + Chilango