¿MÁS VISIBLE?
Pese a la recién inauguración de la llamada “Puerta del Paraíso”, las franjas verdes y blancas que delimitan el tránsito ciclista han perdido el color, por lo que no parece una infraestructura reciente, y eso confunde a los automovilistas además de que en las rejas del Bosque de Chapultepec no existe ningún señalamiento que especifique el paso ciclista.
“Aún hay gente que no respeta nuestro paso y lo que uno tiene que hacer es esquivarlo” indicó Víctor y añadió que pese a ello esta nueva “Puerta del Paraíso” sí visibiliza más la importancia del tránsito ciclista.
LOS OBSTÁCULOS
Los ciclistas que hacen uso de la ciclovía que se extiende por la delegación Miguel Hidalgo y que se pega al lado derecho para su circulación, se encuentran también con constantes invasiones a través de vecinos o camionetas de diversas empresas que los obligan a abandonar la ciclovía en breves tramos reduciendo su seguridad.
“Es la única forma de salir de la casa” indicó una vecina a la que MASPORMAS le cuestionó su demora de más de 10 minutos para quitar su camioneta de la ciclovía.
Otro obstáculo para los ciclistas de la zona son aquellos que transitan con su bicicleta en sentido contrario. La ciclovía abarca únicamente un solo sentido que está designado a lo largo del recorrido, por lo que algunos ciclistas se ven en la necesidad de tomarla en sentido contrario o bien transitan sobre las banquetas complicando el tránsito peatonal.
LO BUENO
El nuevo acceso ciclista que conecta al Bosque de Chapultepec, “Puerta del Paraíso”, fue inaugurado el domingo pasado por el jefe delegacional de la Miguel Hidalgo, Víctor Hugo Romo Guerra.
La puerta ubicada sobre avenida constituyentes con desembocadura en la calle Gobernador José María Tornel, está abierta de martes a domingo con un horario de 5:00 a 20:00 horas por el que únicamente se permite el acceso a ciclistas.
Hoy, en su primer día de apertura han pasado por ella más de 100 ciclistas que agradecen esta conexión ya que anteriormente los amantes del pedaleo tenían que acceder por la siguiente entrada peatonal en la que el problema era el cruce vehicular.
“Era muy peligrosa la otra entrada porque los autos no se detienen, debes esquivarlos, en cambio aquí uno entra derecho”, comentó Angélica Lara, quien es vecina de la zona y asiste de manera asidua al Bosque de Chapultepec.
Esta obra que abarca 150 metros da inicio en la puerta del Bosque de Chapultepec y se extiende por las 11 mil 500 piezas de concreto rectangular que conforman el corredor que posee una pendiente natural que facilita el acceso al interior.
“Está padrísima la entrada, a uno le da gusto pasar por aquí” indicó el señor Víctor García, quien transita de manera constante dicho cruce para acceder al bosque.
(Stephanie Valgañón)