28 de mayo 2024
Por: Alberto Rivera Meza

Automedicación, una práctica común y de riesgo entre mexicanxs

El 80% de la población mexicana se automedica, de acuerdo con el IMSS, lo que implica efectos secundarios indeseables, desde gastritis hasta hemorragias digestivas

El 80% de la población mexicana se automedica, de acuerdo con el IMSS, lo que implica efectos secundarios indeseables, desde gastritis hasta hemorragias digestivas

Aunque la automedicación es un hábito común entre lxs mexicanxs, pues de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud (SSa) 80% de la población lo hace, las consecuencias como la resistencia del organismo a los antibióticos y el desarrollo de alergias, no son para tomarse a la ligera.

La institución encargada de la salud en el país advierte de efectos secundarios, principalmente por el uso de antiinflamatorios no esteroideos que pueden provocar gastritis y hemorragias digestivas, así como interacciones negativas con diversas sustancias.

No obstante, pese al uso cotidiano de medicamentos sin prescripción médica, en la encuesta Automedicación, práctica persistente entre los mexicanos del Centro de Opinión Pública de la Universidad del Valle de México (UVM), se concluye que 54% de las personas en el país están de acuerdo en consumir tratamientos sin prescripción médica de forma responsable.

La pandemia cambió los hábitos

En la encuesta se concluye que situaciones de emergencia sanitaria como la provocada por Covid-19 o en la temporada de Influenza, propician el riesgo de que se incremente este autoconsumo, con la idea de tratar o prevenir enfermedades.

La pandemia, resalta, afectó los hábitos de salud de los mexicanos, ya que 38% disminuyó la frecuencia con la que acudió a una consulta al médico, 19% aumentó la frecuencia de sus visitas y 43% mencionó que se mantuvo igual. Asimismo, 51% no tomó medicamentos sin instrucción de un profesional, 16% se automedicó, 23% lo hizo igual que antes y 10% lo hizo más que antes, es decir, casi la mitad del total tomó medicamentos por cuenta propia.

En contraste, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó en abril de este año que durante la pandemia en todo el mundo se produjo el “uso excesivo de antibióticos”, principalmente entre los pacientes hospitalizados por el coronavirus; sin embargo, advirtió, no se registraron mejoras en los resultados clínicos, y a su vez aumentó potencialmente la amenaza de la resistencia a los antimicrobianos provocada por las “superbacterias”, presentes en 8% de las personas convalecientes por esa enfermedad.

Detrás de la automedicación

Acudir al médico no siempre es considerada la mejor opción para tratar alguna enfermedad, por ello, señala la UVM, 28% de la población se administra algún medicamento sin el aval de un especialista, porque ya le habían recetado el mismo en ocasiones anteriores.

Resalta también que 24% lo hace porque los síntomas no son graves, 14% ante la falta de dinero para la consulta y 9% asegura tener conocimiento sobre el tema y la falta de tiempo para ir al médico.

La institución advierte que 45% de las personas que decidieron tomar los fármacos por su propia cuenta crean resistencia a ciertos tratamientos; el mismo porcentaje no se recupera o empeora la enfermedad, 40% esconden los síntomas de una enfermedad más grave, 34% tienen efectos secundarios y en 32% existe riesgo de intoxicación.

Carlos Nieto, médico familiar del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), explica a + Chilango que la automedicación es parte de un sistema de salud empírico en el que se aplican curaciones o remedios incluyendo medicamentos, que por experiencia la gente usa de manera indiscriminada.

“Únicamente este conocimiento les indica que ese medicamento o remedio les sirve para tal o cual cosa, además que, por no gastar en consulta médica, algunos pacientes o personas ‘empíricas conocedoras’ sugieren o indican remedios o medicamentos”, señaló.

La SSa considera la automedicación como una “mala costumbre con graves consecuencias”, que puede “enmascarar” enfermedades, ya que los medicamentos pueden eliminar algunos síntomas, lo que deriva en un diagnóstico tergiversado. Señala que los especialistas recomiendan a las mujeres embarazadas no automedicarse, pues algunos fármacos se absorben fácilmente en la placenta y pueden afectar al bebé.

Recientemente, especialistas del Hospital Infantil de México Federico Gómez (HIMFG), de la Secretaría de Salud, alertaron que la automedicación en las infancias y adolescencias para el tratamiento de padecimientos dermatológicos representa serios riesgos a la salud. En esos casos, es común el uso inadecuado de corticoides tópicos para enfermedades cutáneas, y que no siempre son recomendados por especialistas de la salud, por lo que recomiendan que el uso de estos fármacos siempre sea con supervisión médica.

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