El camellón puede convertirse en un espacio amigable para los transeúntes, quienes solos o acompañados disfrutan caminar por esta gran avenida de la ciudad, sin embargo, la experiencia se torna desagradable cuando su trayecto es invadido por ciclistas que hacen uso de este espacio como si fuera ciclovía.
Transitar de manera continua se hace imposible cuando se cambia la dirección y el ritmo de cada paso a causa de quienes, en su afán de ahorrar tiempo o simplemente viajar con mayor “libertad”, utilizan un espacio pensado para el peatón.
Choques, rozones, frenados inesperados y posibles sustos son la constante de quienes transitan por Reforma donde los ciclistas se imponen manteniendo su equilibrio y los peatones se cuidan a cada paso.
Andar por Paseo de la Reforma puede ser un acto turístico y placentero pero riesgoso para ciclistas y peatones. Algunas características de esta gran avenida de la Ciudad de México han generado comportamientos irregulares en ciclistas, sobre todo en usuarios de Ecobici (sistema de bicicletas públicas del Gobierno del Distrito Federal).
Constatar los comportamientos inadecuados por parte de aquellos que pedalean sobre dos ruedas requiere únicamente de ponerles atención al caminar sobre Reforma. Algunas irregularidades en su andar pone en riesgo a los peatones, al igual que a ellos mismos.
LA IRRESPONSABILIDAD EN DOS RUEDAS
MÁSPORMÁS hizo un recorrido de Torre Mayor hasta su cruce con av. Hidalgo y Puente de Alvarado. Durante el recorrido, constató conductas irregulares que ponen en riesgo a quienes transiten por ahí.
Un ejemplo es el caso de Roberto, quien caminaba por el camellón de Reforma en dirección a Insurgentes cuando dos ciclistas -que iban jugando- lo esquivaron de manera improvisada mientras él no supo cómo reaccionar. Los jóvenes en bicicleta confiaban en la pericia que su edad implicaba pero pese a la seguridad con la que Roberto daba cada paso esta acción lo hizo sentirse vulnerable.
“Ya van varias ocasiones que me siento vulnerable ante los ciclistas porque a veces uno sólo se centra en caminar y de repente te salen por donde menos lo imaginas” comentó Roberto, quien en sus horas de comida transita por estos camellones diariamente.
En el trayecto de Torre Mayor a Insurgentes se puede observar a ciclistas circular por los camellones, en ocasiones para acudir a las cicloestaciones y dejar la unidad, pero parece que el camellón ha sustituido la ciclovía en este tramo donde los ciclistas utilizan los accesos universales para personas con silla de ruedas como simple subida y bajada de un viaje fuera de la ciclovía.
RIESGO TAMBIÉN PARA LOS QUE PEDALEAN
Luis pedaleaba con seguridad hasta que de pronto visualizó a un ciclista que venía con toda velocidad directo al él sobre la misma ciclovía. Primero imaginó que este ciclista se subiría a la banqueta de manera casi acrobática antes de llegar a él pero al ver que la velocidad y la dirección no cambiaban Luis optó por salirse del carril para evitar cualquier impacto arriesgando su seguridad.
Otra constante falta en los ciclistas es conducir la unidad mientras responden con una mano el celular o bien transitan con los audifonos puestos, lo que reduce su habilidad para reaccionar ante cualquier percance.
Adriana Olivares, usuaria constante de la ciclovía de Reforma, asegura a su vez que los peatones también son un riesgo para los ciclistas: “La gente invade nuestro carril porque no respeta a los ciclistas y como no somos un auto pues piensan que los podemos esquivar fácilmente además hace falta un carril que permita el doble sentido” comentó Adriana y confesó que ella misma ha tomado el carril en contraflujo porque le resulta más práctico e invierte menos tiempo”, comenta.
PUNTOS PELIGROSO
Durante el recorrido se detectó que la ciclovía es confusa para muchos ciclistas a la altura de Versalles, donde la circulación con un notorio giro a la derecha perturba a los ciclistas haciéndolos proseguir de frente por donde no hay ciclovía destinada, arriesgando su seguridad.
También se observó que los ciclistas que dan vuelta en Niza arriesgan su integridad para incorporarse ya que esta avenida no cuenta con ciclovía debido a la existencia de parquímetros, lo que vulnera a los amantes de pedaleo, quienes incrementan su atención para no chocar ningún vehículo estacionado ni ser arrollados por quienes transitan en la misma dirección.
Andar en bicicleta implica más que sólo mantener el equilibrio en este vehículo de propulsión humana, sobre todo en esta avenida donde los ciclistas se han vuelto parte del paisaje urbano pero también riesgo constante para peatones y compañeros del gremio.
NUMERALIA
Espacio recorrido: 3.5 KM De Torre Mayor a Metro Hidalgo
Tiempo estimado en automóvil:20 minutos
Tiempo estimado caminando: 50 minutos
Número de cicloestaciones en el recorrido: 19
Cicloestaciones en camellones: 14
Contador ciclista suma más de 450 mil ciclistas hasta hoy
En promedio pasan 1500 ciclistas al día frente al contador