Varios puntos de la Reforma Hacendaria o Fiscal ponen el ojo en los empleados, por ello el contador público, catedrático en materia fiscal del ITAM y la Universidad Panamericana, José Manuel Velderrain, nos habla sobre los beneficios que le puede traer al trabajador, las obligaciones, los impuestos y en lo que deberá estar abusado por si se aprueba.
Sin empleo
Si te quedas sin chamaba y ya llevas un mes así, a partir del 1 de enero del 2014, podrás pedir el Seguro de Desempleo.
Las condiciones para tenerlo es llevar cotizando más de dos años en el seguro social hasta durante seis meses después de perderlo. En los primeros tres meses se te daría la mitad del salario percibido y en los siguientes tres meses sólo te darán el salario mínimo.
Este seguro no sólo se puede solicitar si en más de cinco años no se ha utilizado.
Los trabajadores por honorarios no entran en este plan.
Seguro Social
Para fomentar que los patrones no dejen a los empleados sin seguridad social, el gobierno les dará un subsidio para que ahora sí lo hagan.
Éste trata de sustituir al de Pequeños Contribuyentes. A las personas que se integren al nuevo Régimen de Incorporación Fiscal, les darán descuentos en el impuesto sobre la renta (ISR) en los seis primeros años que va desde el 100% hasta el 10% en el sexto año. Ya después se normalizará.
El beneficio de este nuevo régimen es combatir la informalidad, de tal manera que puedan aportar las personas que de momento van a estar contribuyendo y los pagos que se les hagan a ellos sean deducibles de impuestos.
Vales
Los vales de despensa están exentos del ISR y son deducibles, pero ahora solo serían deducibles cuando se otorguen a través de monederos electrónicos autorizados por el Sistema de Administración Tributaria (SAT).
Actualmente más del 50% se dan vales impresos en papel o dinero en efectivo, se pretende que ahora todo sea por un plástico, porque al entregar despensas en efectivo, no pagaban impuestos o no se integraban para el Seguro Social.
Se detectó que los empleados no gastaban ese dinero en despensa, sino que muchas veces, en el súper, los cambiaban por productos como cigarros, alcohol, entre otros. Cuando era en dinero en efectivo, se usaba para otro propósito.
Con esto se pretende que el vale de despensa se utiliza para ello.
La mayoría de los vales sean usados sólo en despensa.
Menos deducciones
Muchos trabajadores cada vez presentan más gastos al SAT para deducir sus impuestos. Ahora el gobierno propone limitar el monto máximo de las deducciones personales realizadas por una persona física al año a la cantidad que resulte menor entre el 10% del ingreso anual total del contribuyente, incluyendo ingresos exentos, y un monto equivalente a dos salarios mínimos anuales correspondientes al área del Distrito Federal.
(Cristina Salmerón)