En edificios de los sectores privado y público de la CDMX se debe cumplir con las mismas reglas, entre ellas tener un Comité Interno de Protección Civil, contar con brigadas básicas, nombrar a un responsable por piso y adquirir equipo necesario en casos de emergencia.
.
ESCRIBE: MIRIAM JIMÉNEZ
.
Luego de los sismos de 2017 en la Ciudad de México, se reformó lo que hoy se conoce como la Ley de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, que establece el derecho de la ciudadanía a la Protección Civil, lo que implicó pasar de la simple elaboración de reportes a la instrumentación de un protocolo de acción en caso de una eventualidad, con vigencia de dos años.
.
Por esta razón, las autoridades capitalinas reforzaron la capacitación y los simulacros.
.
Desde 2019, los programas de protección civil ya no se aprueban, ahora se registran y es responsabilidad del propietario, representante legal, administrador, gerente, director de la empresa o titular de la dependencia en el caso de los inmuebles del sector público, cumplir con las medidas correspondientes.
.
MISMAS REGLAS A ESTABLECIMIENTOS
.
Tanto en los edificios del sector privado como las oficinas públicas se debe cumplir con las mismas reglas, es decir, tener un Comité Interno de Protección Civil; contar con brigadas básicas que constan de primeros auxilios, combate y prevención de incendios, evacuación, repliegue y comunicación; y cuando no cuenten con el personal suficiente para formar las brigadas, se pueden crear brigadas multifuncionales donde en una sola el personal tendrá las habilidades y conocimientos de las cuatro básicas.
.
En el caso del sector privado se cumplen las reglas generales pero la empresa se organiza como mejor le convenga, siempre y cuando cumpla con la normatividad establecida.
.
Se pide que el programa lo haga el Responsable Oficial de Protección Civil Institucional, que puede presentar sus servicios a cualquier institución que lo contrate. En el caso del sector público, este responsable es un funcionario público que sólo puede prestar su servicio a la dependencia que lo postuló.
.
En ambos casos se tiene que hacer una identificación y análisis de riesgo, establecer un plan de reducción de riesgos, programa de capacitación, programa de simulacros, señalización, equipo de prevención y combate de incendios, receptor secundario de alerta sísmica, plan de contingencia de acuerdo a los riesgos identificados y analizados, y plan de continuidad de operaciones.
.
Por ley, en todos los inmuebles se debe contar con un gabinete con equipo como picos, cascos, chalecos, palas, lámparas de emergencia, un botiquín con equipo de primeros auxilios, equipo para combate de incendios como botas y el traje completo, extintores, entre otros elementos que se requieran dependiendo del inmueble en el que se encuentre.
.
PROTOCOLO PARA BRIGADISTAS
.
Marco Polo Sánchez, Jefe de Brigadistas en la Secretaría de Gobierno de la Ciudad de México, se integró al equipo hace 10 años y recibió adiestramiento y capacitaciones para formarse como brigadista, que constan de la introducción a la protección civil y protocolos básicos haciendo énfasis en sismos, uno de los fenómenos naturales más recurrentes en la capital.
.
Después recibió capacitación en el Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas por la Cruz Roja y el Escuadrón de Bomberos.
.
Aunque cualquier persona puede formar parte del equipo de brigadistas de una institución pública o privada, durante el periodo de formación se requiere de ciertas capacidades físicas y emocionales, pues ante una emergencia se requiere gestionar las emociones para poder brindar el respaldo y la calidez que las personas requieren, por ejemplo, después de un sismo.
.
“Yo hago dinámicas grupales, en lugar de que cese el movimiento. Si bien no duran más de un minuto, en ese momento parece eterno, así que comienzo a contar, con el objetivo de contener a las personas y no entren en una crisis de pánico”, indica.
.
Entre las actividades que desempeña Marco Polo está la de dirigir a un grupo de voluntarios en las brigadas de su lugar de trabajo y en la Ciudad de México, en caso de que la emergencia así lo requiera, asegurarse que el resto de los jefes de mando de otras áreas lleven a cabo el protocolo de evacuación, hacer el check list, ayudar a evacuar a las personas con alguna discapacidad e inspeccionar el inmueble de manera que no represente ningún riesgo.
.
La ley estipula que cada piso del inmueble debe tener al menos un brigadista para cada tipo de labor. Cuando se trata de instituciones con mayor número de empleados, se generan células para la correcta actuación en caso de emergencia.
.
En su experiencia, Marco Polo considera que no hay suficientes brigadistas para atender una eventualidad y hace un llamado a la ciudadanía para acercarse a las herramientas de capacitación.
