Con mala calidad del aire en la zona noreste y calles sin circulación de automóviles, amaneció la ciudad de México después de la celebración de Nochebuena, durante la cual se suscitaron seis incidentes viales.
Avenidas como Circuito Interior, Insurgentes y Paseo de la Reforma permanecían desiertas de automotores durante esta mañana de Navidad, sólo alguno que otro peatón se veía caminar por las aceras.
Los 104 puntos de partículas suspendidas en la zona noreste del valle de México, conforme al Índice Metropolitano de la Calidad del Aire (Imeca) se hacían evidentes con la capa de humo que afecta la urbe, producto de la quema de cohetes y demás artículos pirotécnicos usados anoche, lo que contribuyó a la mala condición atmosférica.
La mayoría de los negocios aledaños a las importantes vías citadas se encontraban cerrados y algunos con letreros de que por este miércoles no habría servicio o comenzaría casi al mediodía.
En la intersección de Insurgentes y Reforma dos jóvenes con evidente alto grado de alcohol en la sangre, producto del festejo, ocuparon una de las bancas de los alrededores para tomar un descanso antes de llegar a su destino final.
La calma citadina del amanecer de este miércoles, inusual y producto de la resaca de los festejos de Nochebuena, permitirá a varias familias acudir a un espacio público y disfrutarlo sin las aglomeraciones acostumbradas.
De acuerdo con reportes de la policía capitalina, en total se registraron seis accidentes viales durante la Nochebuena, en uno de los cuales falleció una de las personas involucradas.