Como si fuera un mal concierto, promotores, artistas y locutores abuchearon la propuesta del gobierno federal de gravar los espectáculos públicos con 16% de IVA, como parte de la reforma hacendaria.
Los calificativos a la propuesta son variados, pero la mayoría coincide en que se afectará al consumidor final y a la industria.
“Definitivamente es una propuesta fuera de realidad, que le falta respeto además, a las necesidades de la ciudadanía. La industria de la música debería unirse y reclamar los derechos de los artistas emergentes. Debemos defendernos”, declaró Paco Ayala, integrante de la banda de rock Molotov.
Al respecto Javier Aceves (Baxter), director de 7boom y locutor de Ibero 90, considera que la propuesta “le va a dar en la torre” a los productores independientes, que en los últimos 12 años habían florecido positivamente.
“Los productores de eventos consolidados, sí sentirán un jalón en sus ganancias pero no van a dejar de hacer conciertos, el verdadero afectado será la industria independiente y los consumidores. Los costos de los eventos se van a elevar y al final, es un retroceso para la difusión de la cultura”, dijo el locutor.
En esa misma línea Diovanny Garfias, editor en jefe WARP Magazine advierte: “hablemos de consecuencias reales: ¿disminuirá el número de conciertos en nuestro país?, no lo creo. ¿Será más difícil generarlos?, sin duda. ¿Veremos nacer a tantas productoras independientes como en los últimos 10 años?, difícilmente. ¿Aumentará el precio de los boletos?, por supuesto. Al final, es una vez más el consumidor interesado en exponerse a la cultura en sus diferentes facetas, quien terminará pagando los platos rotos”.
Rodrigo Pandal, socio fundador de Pasagüero señala que es buena, siempre y cuando “se aplique a los grandes consorcios ya que es ahí es dónde se concentra la mayor parte de las ganancias”.
Mientras que Pablo Zacarías, director general de 2abejas, productora de conciertos y eventos en México desde 2006, anotó que “a nadie le gusta que le cobren impuestos, pero no está tan grave”.
“Algo que sí debería ser regulado son las cuotas que cobran las empresas de boletos por prestar su servicio, que de hecho perjudican mucho más al usuario y al promotor, que el propio IVA”, sostiene.
Más Por Más buscó la postura de OCESA, sin embargo prefirieron esperar “a que las cosas que conviertan en hechos, para no hacer especulaciones al respecto”.
Raúl David Vázquez, Rulo
Locutor en Reactor y director editorial de La Semana de Frente
Aparentemente no se está distinguiendo entre espectáculos organizados por independientes que no le generan grandes ingresos a sus promotores, con los grandes eventos generalmente patrocinados y, en mayor medida, por consorcios empresariales que dominan el medio del entretenimiento. Es decir, quieren llevarse a pequeños empresarios y promotores culturales entre las patas.
Gonzalo Oliveros
Locutor, coordinador de RMX y organizador del festival musical gratuito más grande de México (212RMX).
Creer que hay quienes pueden pagar espectáculos y, por ello, deben de dar un impuesto por su poder adquisitivo es clasista, incluso con un sesgo de discriminación. La música es una ventana a otras culturas, es apertura a distintas ideologías. Los conciertos, desde una tocada grupera hasta el más sofisticado concierto de rock, tienen tanto valor y aporte que un libro, una película o un documental.
Gerardo Belmont
Manager de Lost Acapulco, Simplifires y A to Z
Si de por sí ir a un concierto incluye pagar: boleto de entrada, bebidas al 500% de su valor real, comida, estacionamiento (aunque sea en la calle), taxi carísimo de regreso a casa. Este impuesto no es para mejorar nuestro país, ni la escena musical, sino para seguir solventando los gastos de una burocracia ineficiente y corrupta.
Héctor Mijangos
Director de la empresa Noiselab
Se me hace ilógico que la cultura sea gravada con el IVA. Creo que lo que se necesita es apoyar y facilitar.
Guillermo Billy Méndez
Músico, integrante de Motel
En los últimos años, como ha ido cambiando la industria, a los músicos nos ha costado mucho trabajo mantenernos en el mercado y pelear contra la piratería y el Internet. La música es cultura y se debería considerar como tal, y pues si esto procede nos estarían quitando herramientas dentro de esta industria, ya de por sí, en crisis.
(Yulianna García)