El Centro Cultural Jaime Torres Bodet del IPN celebra 60 años de existir, así que dale una mordida a su edificio, su historia y sus eventos
El pasado 17 de agosto, el Centro Cultural Jaime Torres Bodet del Instituto Politécnico Nacional (IPN) cumplió 60 años. El “Queso”, como también es llamado por la estructura en su techo, es el hogar de distintas propuestas artísticas y de entretenimiento con las que ha buscado convertirse en un referente cultural para lxs estudiantes, pero también para quienes habitan en el norte de la Ciudad de México y en otras zonas de la entidad.
El Centro Cultural Jaime Torres Bodet fue construido junto con la unidad Adolfo López Mateos entre 1959 y 1964 bajo el desarrollo del arquitecto Reinaldo Pérez Rayón, que planteó un lenguaje funcionalista moderno para el edificio, platica José Antonio Cruz González, director de Difusión Cultural del IPN.
Actualmente lo consideran un espacio multifuncional con facilidad para adaptarse a lo que se necesite, aunque no ha tenido muchas transformaciones.
El director explica que siempre se ha buscado dirigir y acercar la cultura a la comunidad politécnica de forma sencilla. “(El Politécnico) es conocido por la formación de científicxs, técnicxs, ingenierxs e investigadorxs.
Tal vez la parte cultural no es un tema, pero no deja de ser importante. Para el Instituto sí es muy relevante, tan es así que lo tomamos como formación integral”, afirma en entrevista.
Pero el interés del IPN por ofrecer cultura va más allá de una oferta enriquecida con talleres, presentaciones y concursos de literatura, danza, teatro y música, entre otras actividades.
Cruz González comenta que también se encargan de traer trabajo escénico-artístico externo, es decir, propuestas no creadas por lxs alumnxs pero sí dirigidas a ellxs, que van desde obras de teatro hasta conciertos. Un ejemplo: el show de Molotov en mayo pasado.
Además, destaca que el equipo de Programación se mantiene atento a lo que la comunidad escucha, ve y busca, al mismo tiempo que se interesan por los proyectos de lxs jóvenes para darles espacio. “Es una manera importante de reconocer su trabajo, pero también de visibilizar lo que el Instituto hace”, subraya.
¿Y los demás chilangxs?
De acuerdo con Cruz González, el Centro Cultural Jaime Torres Bodet le ha abierto sus puertas al público en general desde hace años con presentaciones y colaboraciones.
Al respecto de estas últimas, pone como ejemplo a la Secretaría de Cultura local, con la cual se unieron al proyecto de galerías abiertas con exposiciones sobre la avenida Wilfrido Massieu.
Además, su sala de cine, el Salón Indien, tiene funciones gratuitas para todas, todos y todes; se arman actividades al aire libre como picnics; y el Auditorio Ing. Alejo Peralta es hogar de la Orquesta Sinfónica del IPN, que el público en general puede escuchar por 50 pesos.
Así buscan deshacer esa creencia de que la cultura sólo se encuentra en el centro y el sur de la CDMX. Sus aliadas son las redes sociales, asegura el director, porque les han permitido tener mayor alcance, junto con la labor que ya realizan como institución.
“Creemos firmemente que el trabajo que se hace al interior va a permear hacia el exterior, el hecho de atender a nuestros chicos, los talleres, los grupos, los concursos, harán que de pronto puedan hablar de nuestro Centro Cultural”. No obstante, reconoce que aún se puede hacer más.
La celebración
El arranque de los eventos de aniversario del Centro Cultural Jaime Torres Bodet se vivió con la develación de una placa el 31 de agosto, que contó con la presencia del coro del Politécnico.
A éste le han seguido la inauguración de dos exposiciones y la proyección especial de Mi amigo robot. En los siguientes días vendrán el concierto de Rodrigo Cuevas “El Matador” (exintegrante de Gipsy Kings) el 27 de septiembre y la cancelación del sello postal conmemorativo el 17 de octubre.
Las exposiciones
Hasta diciembre estarán abiertas “Entre la técnica y el arte. 60 años del Centro Cultural Jaime Torres Bodet” y “Antonio Rodríguez y su legado politécnico”.
La primera muestra, ubicada al exterior, realiza un recorrido histórico desde la construcción del Queso hasta sus actividades actuales mediante 60 fotografías, pasando por sus espacios, los primeros talleres impartidos, las presentaciones de alumnos y eventos de los que ha sido sede como la Feria Internacional del Libro del IPN.
Por su parte, la segunda exposición rinde homenaje a Antonio Rodríguez, quien consolidó la actividad artística en el Politécnico. Ubicada al interior del edificio, cuenta con piezas que añadió al acervo de arte del Instituto, además de objetos personales como su máquina de escribir y un juego de té.
+Datos
- Como parte del festejo, la familia del arquitecto Reinaldo Pérez Rayón donó los planos originales del Centro Cultural Jaime Torres Bodet al acervo del IPN. Asimismo, el artista plástico Luis Aguilar realizó la escultura El burrito, expuesta en el exterior
- Casi 2,000 piezas de arte forman parte del acervo del IPN, que incluye obras donadas por artistas de talla internacional y nacional como Manuel Felguérez
- Más de 160 talleres son impartidos en las diferentes unidades académicas (media superior y superior) del IPN
- En 2025 cumplirá 60 años la Orquesta Sinfónica del IPN (OSIPN) y en 2026 el Instituto festejará 90 años de su fundación