En 2021, el Consejo Nacional de Población contabilizó en la Ciudad de México 261 embarazos de niñas menores de 14 años
Este 11 de octubre es el Día Internacional de la Niña, una fecha establecida desde 2011 por la Asamblea General de las Naciones Unidas que tiene el propósito de reconocer sus derechos, promover su empoderamiento y al mismo tiempo conocer los problemas excepcionales que afrontan.
El embarazo a temprana edad, por ejemplo, es un foco de alarma que ha tenido atención de organizaciones civiles, universidades y algunos gobiernos para poder sumar esfuerzos y construir alternativas de prevención que busquen disminuir esta situación en millones de niñas y adolescentes.
Si bien sucede en todo el mundo, diversas organizaciones como el Fondo de Población de las Naciones Unidas señala que las niñas pobres, sin educación, de minorías étnicas o de grupos marginados, tienen tres veces más riesgo de quedar embarazadas que de aquellas con educación o que viven en zonas urbanas.
En la Ciudad de México, el Consejo Nacional de Población reportó en 2022 que cinco alcaldías concentran altas tasas de fecundidad entre adolescentes de 15 a 19 años.
Se trata de:
- Milpa Alta (88 nacimientos por cada mil adolescentes)
- Xochimilco y Cuajimalpa (80 nacimientos por cada mil adolescentes)
- Tláhuac (71 nacimientos por cada mil adolescentes)
- Magdalena Contreras (66 nacimientos por cada mil adolescentes)
Esto a diferencia de Benito Juárez (11 nacimientos por cada mil adolescentes), Miguel Hidalgo y Azcapotzalco (26 nacimientos por cada mil adolescentes)
En 2021, en plena pandemia, el Consejo Nacional de Población (Conapo) contabilizó en la ciudad 261 embarazos de niñas menores de 14 años; 80% de estos nacimientos tenían registro en Milpa Alta, Xochimilco, Cuajimalpa.
Por su parte, la Secretaría de las Mujeres dio a conocer en 2019 que en la entidad nacen cada año más de 18 mil bebés de madres de 19 años. De éstas, casi 7 mil tienen 17 años y 400 son niñas de 15 años.
Las últimas de este rubro, en su mayoría, aseguró que son “víctimas de violencia sexual que viven un embarazo de alto riesgo y que no tendrían que ser después obligadas a ser madres”.
Aline García, integrante del programa de Prevención del Embarazo Adolescente de la Faculta de Medicina de la UNAM, ha señalado que este fenómeno genera morbimortlidad (tasa de muertes en una población y en tiempo determinado) materna y fetal, porque se considera de alto riesgo.
“En estos embarazos hay mayor probabilidad de desarrollar enfermedades como preeclampsia, parto pretérmino, diabetes gestacional o eclampsia. Por ello, debe haber una estrategia para disminuirlos”, indicó.
Acciones preventivas
En cada entidad de la República, existe desde 2015 un Grupo Estatal para la Prevención del Embarazo en Adolescentes (GEPEA) encargado de construir acciones de cooperación específicas en política pública.
La Ciudad de México es la entidad que constantemente publica informes desde que en 2019 decidió, por acuerdo entre la Secretaría de Gobierno y la Secretaría de las Mujeres, conformar un grupo interno de trabajo para dar continuidad al GEPEA CDMX.
En 2022, la Secretaría de las Mujeres local realizó diversas acciones para prevenir la violencia y embarazos en adolescentes, las cuales impactaron en 111 mil 994 personas (76 mil 400 mujeres, adolescentes y niñas) de las 16 alcaldías.
Para ello se llevaron a cabo 2 mil 578 actividades preventivas, entre las que destacan pláticas, tertulias, mesas informativas, cinedebates, brigadas de difusión y conmemoraciones de fechas importantes para la mujer.