El edificio que albergaba a la Octava Agencia del Ministerio Público, en la colonia Narvarte, no formaba parte de un listado de edificios con valor patrimonial o artístico que envió el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) a la delegación Benito Juárez en mayo pasado, revelan documentos en poder de MÁSPORMÁS.
El pasado 6 de octubre, MÁSPORMAS publicó que por una omisión por parte de la Oficialía Mayor del GDF, no se había solicitado el aval del INBA para intervenir el edificio y, en consecuencia, se había autorizado su demolición, pese a estaba considerado como patrimonio artístico. No obstante, en mayo del año pasado, la Dirección de Desarrollo Urbano de la Delegación Benito Juárez solicitó mediante el oficio DDU/508/2013 al Instituto Nacional de Bellas Artes el listado de inmuebles con valor patrimonial o artístico de la demarcación.
El 30 de octubre de ese año, Dolores Martínez Orralde, titular de la Dirección de Arquitectura y Conservación del Patrimonio Artístico del Inmueble del INBA, entregó a la Delegación Benito Juárez el listado de inmuebles con valor artístico, en el que no se incluía el edificio ubicado en la esquina de avenida Cuauhtémoc y Obrero Mundial, según consta en el listado del cual MÁSPORMÁS tiene copia.
En el mismo oficio, Martínez Orralde también aclaraba que el documento era un “avance en proceso de revisión y actualización” y pedía esperar una nueva relación para mediados de 2014; esta respuesta llegó el 29 de octubre, ocho días después de que la Dirección de Obras de la delegación ya había aprobado la realización de la obra.
El 9 de diciembre, la arquitecta Martínez Orralde solicitó mediante un oficio con calidad de “urgente” a Luis Vizcaíno Carmona, director Jurídico y de Gobierno de la delegación Benito Juárez, la verificación y suspensión inmediata de las obras, pero la demolición no se detuvo. El 13 de diciembre de 2013, la empresa Grupo Danhos –responsable de la obra que se construirá en el predio– obtuvo una licencia que autorizaba la demolición del edificio.
MÁSPORMÁS buscó una entrevista con Dolores Martínez, pero el área de comunicación social del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), del cual depende el INBA, informó, a través de un correo electrónico, que “Conaculta no autorizó ni demolió el edificio, pero sí considera lamentable la demolición autorizada por instancias ajenas al INBA e INAH”.
DESPUÉS DE LA DEMOLICIÓN
Actualmente los trabajos de construcción en el predio permanecen suspendidos debido a que Grupo Danhos no entregó un estudio de impacto ambiental, necesario para construir.
El sábado 25 de octubre, integrantes de la asociación vecinal “La Voz de Narvarte”, que se oponen a la obra, realizaron una recolección de firmas para pedir al Gobierno del DF que se detenga el proyecto y se construya un museo en el lugar.
(Alejandra Crail)