La CDMX ha sido protagonista de muchas películas a lo largo de más de un siglo. Esta es la primera parte que abre con una de las más importantes
Por Carlos Gómez Iniesta – The Film Tours México*
Ya chole con “esta es la casa donde vivía Cleo en Roma” o “Arnold Schwarzenegger estuvo en el Metro Chabacano para filmar El vengador del futuro”. Pareciera que sólo tenemos notas de las mismas cinco películas de siempre pero esto se acaba hoy gracias a iniciativas de promoción bien estructuradas.
The Film Tours México es un movimiento que, desde hace poco más de dos años, se ha dedicado a rescatar las huellas del cine en nuestras ciudades a través de la investigación documental y los recorridos culturales. Su labor arroja luz a los rincones que han servido de escenario para producciones icónicas e impulsa la conservación de las calles y edificios que han formado parte de nuestro enorme legado fílmico. Como parte de este esfuerzo, junto con Chilango, hemos seleccionado algunas locaciones de películas que ya forman parte del ADN del mexicano. Recorrerlas es una prueba de que el cine trasciende las pantallas y se esconde en los rincones por los que pasamos todos los días.
AMORES PERROS
Sabemos que en algún momento ni Iñárritu ni Arriaga nos querían tanto (ver Chilango de marzo 2007 para más referencia), pero eso nunca nos impidió reconocer el poderoso impacto que esta película tuvo en nuestro cine. Desde su estreno en el año 2000, no sólo marcó un antes y un después, sino que también nos hizo mirar nuestra ciudad con otros ojos, ya fuera explorando locaciones nuevas u otras tan cotidianas como la Condesa. Con su fotografía inusual, el soundtrack original y una historia episódica, a estas alturas aun se sigue tratando de imitarla, pero ninguna ha tenido la trascendencia que tuvo Amores perros en nuestra memoria.
Peleas clandestinas
Privada de las Flores 10, Huichapan
Limitada por el Panteón Alemán y la avenida México-Tacuba, esta casa se esconde en un laberinto de calles estrechas. En la película, las peleas de perros se organizan en la azotea o en el patio de la planta baja, donde han improvisado un pequeño ring. Cerquita de ahí, el Jarocho busca que se le baje la adrenalina a Pancho peleando con cualquier perro callejero. Es ahí donde entra Cofi a escena y, a mordidas, le dará una lección letal a su oponente. Por eso el diálogo se hizo canon: “¿Ya supiste del desmadre que armó tu perro?”.
Trabajito del Chivo
Restaurante Mikado. Paseo de la Reforma 369
“Excelente comida japonesa, preparada al momento y el restaurante con un agradable ambiente”, dice una reseña de Google. Abierto en 1983, quizá las críticas de los alimentos y el ambiente cambiarían al recordar que el Chivo (Emilio Echeverría, Q.E.P.D) hizo el viaje desde Ecatepec hasta esta esquina para asesinar por la espalda al industrial Otto Lievermann. Para todo cinéfilo, la barra de teppanyaki que se encuentra frente al ventanal que da a Reforma quedará por siempre manchada con su sangre hirviendo.
El choque
Juan Escutia y Atlixco, Condesa
Octavio (Gael García Bernal) huye del Jarocho (Gustavo Sánchez Parra) en un intento suicida de salvar a Cofi, su perro. Junto con Jorge (Humberto Busto) que va de su copiloto, escapa desde Eje 1 Oriente y Emilio Carranza en San Andrés Tetepilco hasta la Condesa, un tramo que es prácticamente imposible hacer en menos de treinta minutos. En esa carrera, el Ford Grand Marquis 1981 se pasa la roja de Juan Escutia y se topa de costado con el Malibu 1997 de Valeria (Goya Toledo) que venía muy tranquila por Atlixco. A la postre, este encuentro del destino se convirtió en el choque más famoso del cine mexicano, tanto así, que se colocó una placa en la esquina donde están los tacos de guisado de Don Juan. Lamentablemente, hoy sólo queda la marca de esta en la pared porque algún perro se la transó.
Casa de Susana
Leiria 14, San Andrés Tetepilco
Casa llena. Aquí vivía Octavio, su mamá (Adriana Barraza), su hermano Ramiro (Marco Pérez) con su esposa Susana (Vanessa Bauche) y su hijo, ah, y el Cofi también. No es por intrigar, pero en el seno de este hogar se esparcen muchos de los males de la película: en sus paredes comienza un amor prohibido y las envidias entre hermanos. También la prueba de que Cofi es un súper can, no sólo porque es el campeón de las peleas, sino porque se echa una caminata de más de tres horas para agarrarse con Pancho hasta la colonia Huichapan, desatando la ira de su dueño, el Jarocho.
Octavio plantado
Central de Autobuses de Taxqueña
Otra terminal de autobuses, otro escenario de amor frustrado en el cine mexicano. En la columna 24, Octavio espera con el cabello rapado al ras y cicatrices en la cabeza. Fuma para disimular la angustia: ha comprendido que Susana no llegará y, resignado, no le queda más que marcharse, cojeando por el impacto del brutal accidente que él mismo provocó.
Espera siguientes ediciones con más lugares emblemáticos del cine en la capirucha. Si un día quieres asistir a un film tour, sigue las redes @thefilmtoursmx o la página www.thefilmtours.com.

La labor de The Film Tours México arroja luz a los rincones que han servido de escenario para producciones icónicas e impulsa la conservación de las calles y edificios que son parte del legado fílmico
- Más de 7,000 películas de ficción se calcula que han sido realizadas en locaciones de la CDMX
- Desde los años 90 se acuñó el término “turismo cinematográfico” para describir la experiencia de visitar lugares donde se filmaron películas o series
*Texto adaptado para + Chilango diario