En 2050 un cuarto de la población que habita en el Distrito Federal pertenecerá a la tercera edad, aún así las políticas públicas dirigidas a este sector de la sociedad solamente son asistencialistas, opinó Denhi Rosas, académica de la UNAM.
La estudiante de posgrado de la facultad de Ciencias Políticas y Sociales advirtió que no solamente se debe tratar con las personas que tienen más de 60 años, ya que en la capital habitan 800 ciudadanos con más de 100 años de edad.
Para atender estas necesidades, la universitaria propuso la creación de redes de empoderamiento del adulto mayor, como las que han surgido en Tlalpan, demarcación en donde han surgido 30 organizaciones formales de este tipo.
Rosas Zárate rescató algunas iniciativas que se han planteado en el Consejo Asesor para la Integración, Asistencia, Participación y Defensa de los Derechos de las Personas Adultas Mayores para atender a este grupo vulnerable.
Por ejemplo, se encuentra la propuesta de crear una ciudad amigable, lo cual implicaría rediseñar la arquitectura de la capital para aumentar el número de rampas, elevadores, pasamanos y lugares de descanso disponibles.
También resaltó los beneficios de crear hogares temporales para viejos que no tienen familiares o personas que puedan hacerse cargo de ellos. En estos sitios los adultos mayores se pueden quedar de ocho a 18 horas.
Ante la creciente demanda de servicios para personas de la tercera edad, la universitaria urgió la creación de una industria de vestido dirigida a este sector y recomendó modificar los esquemas de difusión en medios de comunicación.
LAS LIMITANTES
Aunque la esperanza de vida en el DF es de 78 años para mujeres y 73 para los hombres por los servicios de salud, tecnología, descenso de la fecundidad y estilo de vida, la mayoría de los ancianos padece enfermedades crónico-degenerativas.
Otro de los problemas que deben enfrentar es que 11% de la población de la tercera edad tiene alguna discapacidad y 46% tiene dificultades económicas por no contar con una fuente de ingreso o que ésta sea muy limitada.
El 27% aún está activo y trabaja en la informalidad, solamente 34% son pensionados o jubilados, lo cual “implica gran responsabilidad de las autoridades para darles seguridad social”, señaló Rosas Zárate.
¿QUÉ SE REQUIERE?
En el análisis histórico realizado por la universitaria encontró que la mayor parte de las políticas públicas que se han realizado en el Distrito Federal y el país son de tipo asistencialista, en lugar de ofrecerles un espacio abierto en la sociedad.
El fin es empoderar a los adultos mayores para que trabajen en sus comunidades y sean ciudadanos participantes, conociendo todos los derechos que tienen a través de la Constitución Mexicana de los Estados Unidos Mexicanos, comentó.
(Con información de Patricia Carranza)
Cuidan la casa y salen perdiendo
Las mujeres de la tercera edad son las más afectadas debidos que 440 mil amas de casa que dedicaron su vida a la labor doméstica se encuentran en situación de pobreza debido a que su trabajo no se reconoce como oficial por lo que sólo reciben la ayuda del programa Nueva vida a los 68 que otorga seguridad económica básica de 971.40 pesos mensuales a toda persona mayor de 68 años de edad residente del Distrito Federal.
(IGANACIO GÓMEZ)
