Durante su tercer día de actividades en México, el Papa Francisco salió a las 9:26 horas de la Nunciatura Apostólica para, tras convivir con los fieles unos minutos, dirigirse al Campo Marte y abordar un helicóptero que lo trasladaría a Ecatepec, Estado de México, para oficiar una misa.
Tras 25 minutos de vuelo, el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, el presidente municipal de Ecatepec, Indalecio Ríos Velásquez, y el obispo Óscar Roberto Domínguez recibieron al papa Francisco a su llegada al mercado de autos Ballisco.
A bordo del papamóvil, el Pontífice recorrió los poco más de ocho kilómetros de camino restante hacia la Unidad de Estudios de Ecatepec, donde oficiaría la misa ante más de 300 mil personas en la zona conocida como El Caracol.
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En la primer misa multitudinaria de su visita a México, el Papa advirtió contra las tres tentaciones que enfrenta todo cristiano y que encierran “en un círculo de destrucción y de pecado”: riqueza, vanidad y orgullo. “Con el demonio no se dialoga, no se puede dialogar, nos va a ganar siempre”, dijo ante miles de personas.
Además, pidió hacer de México una tierra de oportunidades, donde no exista desesperación ni pobreza, donde nadie termine destruido por los “traficantes de muertes”.
“Donde no haya necesidad de emigrar para soñar, donde no haya necesidad de ser explotado para trabajar, donde no haya necesidad de hacer de la desesperación y la pobreza de muchos el oportunismo de unos pocos”, dijo.
EL PAPA VISITA A NIÑOS CON CÁNCER
Luego de la misa en Ecatepec, el Pontífice llegó al Hospital Infantil de México “Federico Gómez”, ubicado en la colonia Doctores de la Ciudad de México, para visitar el lugar y convivir con los niños.
El Papa fue recibido por Angélica Rivera, presidenta del Consejo Consultivo del DIF, el secretario de Salud, José Narro, y directivos del Hospital, donde recibió como regalo una imagen de la Virgen María. En su discurso, agradeció al personal médico que atiende a sus pacientes “no sólo con medicinas, sino con cariñoterapia”.
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Una adolescente del Hospital Infantil cantó el Ave María y otros dos niños hicieron sonar una campana a manera de celebración por superar el cáncer, la cual resuena cada vez que un paciente es declarado libre de la enfermedad.
Fundado en 1943, este hospital recibe diariamente a un nuevo niño con cáncer, la mayoría de ellos con leucemia. Francisco, es el segundo Papa que visita este hospital pediátrico, pues Juan Pablo II acudió en su primer viaje a México.
Una vez realizada la visita, el Papa Francisco regresó a la Nunciatura Apostólica para pasar la noche, antes de su viaje a Chiapas este lunes.
(Información: Notimex / Foto: Cuartoscuro)
