En el Distrito Federal hay un millón 200 mil perros en situación de calle, de acuerdo con la Secretaría de Salud. ¿Y cuántos gatos hay? No se sabe. No existen datos suficientes para dar una cifra sobre gatos callejeros debido a las diferencias en sus hábitos reproductivos y de vida cotidiana, comparados con los perros, aseguran especialistas.
“Es complicado dar una cifra exacta sobre los gatos en la calle o abandonados debido a varios factores. Las gatas se reproducen más rápido que las perras y, en promedio, tienen cuatro cachorros por camada. Otra diferencia es que los gatos suelen ocultarse, muchos salen en horarios nocturnos”, explica Arturo Jiménez, director de la asociación Gatos Pingos.
Esta asociación se dedica a la protección de gatos callejeros y promueve su esterilización pues al hacerlo se combate la sobrepoblación de felinos y se mejora la calidad del aire.
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“Hay una repercusión en la salud pública: hay muchísimos animales que están en la calle, y sus heces contaminan el aire que respiramos todo el tiempo en la ciudad”, dice Luisa Ramírez, veterinaria en el Centro Veterinario Felino.
La vida en las calles tampoco es segura para los gatos. Sandra Martinez, veterinaria que coordina los asuntos médicos de Gatos Pingos, explica que las peleas de gatos son uno de los riesgos a los que se enfrentan en la calle. A través de mordidas se transmiten el ‘SIDA felino’ —Virus de Inmunodeficencia Felina— y la leucemia felina, ambas enfermedades mortales para los gatos.
La esperanza de vida de un gato aumenta simplemente por ser esterilizado a temprana edad, explican los expertos. La probabilidad de que las mascotas se contagien del SIDA felino disminuye, ya que esta enfermedad se transmite también a través del apareamiento, dice Martínez.
“Los aspectos positivos de esterilizar a una mascota repercuten a muchos niveles: en las hembras, si las esterilizas antes del primer celo, disminuyes en 85% la probabilidad de cáncer de mama”, explica Ramírez.
ESTERILIZADOS Y ‘BIEN PORTADOS’
Los gatos esterilizados pierden conductas relacionadas a la reproducción que pueden llegar a ser molestas para los dueños, como el “canto” de las hembras cuando están en celo. Los machos, al ser esterilizados, dejan de “marcar” su territorio. En general, los gatos esterilizados se vuelven más hogareños.
“Los gatos tienen una persona o animal de apego, y si esa persona o animal no está en la casa, al gato le vale y va a reproducirse donde sea. Cuando son gatos esterilizados, macho o hembra, se quedan más en casa. La persona de apego se vuelve el propietario y el gato pierde el interés de salir a la calle, su vida se vuelve el departamento o casa o metros cuadrados que le asignen”, explica Ramírez.
DATOS QUE TE INTERESAN
*60 días dura el periodo de gestación (el embarazo) en los gatos.
(Amín López)