Los peregrinos que asisten a la Basílica de Guadalupe cuentan con una opción de alojamiento sin costo. La “Estancia del Peregrino” actualmente brinda servicios gratuitos de alojamiento que funcionan los 365 días del año, una vía para los 7 millones 200 mil peregrinos, que acudieron este año, de acuerdo con datos de Protección Civil.

A casi dos años de ser administrada por de la Basílica de Guadalupe, la estancia pasó a manos de la Delegación Gustavo A. Madero, y con ello se consiguió la gratuidad en sus servicios, ya que durante el manejo de la Basílica, el lugar cobraba por lo menos 50 pesos para poder acceder.

Durante el 11 y 12 de diciembre, días en los que feligreses llegan para celebrar el aniversario de la aparición de la Virgen de Guadalupe a Juan Diego, la estancia recibe a cerca de 5 mil peregrinos que asisten al recinto para cantarle las mañanitas a la “Virgen morena”.

Al respecto, Armando Mondragón, encargado de la “Estancia del Peregrino”, dijo que tras el cambio de administración, el cambio más significativo fue la gratuidad en los servicios de alojamiento y salud que brindan.

“Los peregrinos están contentos porque cuando les hacemos la  invitación a pasar a los dormitorios nos dicen: ‘es que no traemos dinero’, pero cuando les explicamos que no se les cobrará nada, hasta  nos lo agradecen”, comenta Mondragón.

La estancia cuenta con 500 catres,  baños, regaderas y dormitorios, ubicados en tres edificios. Uno es únicamente para mujeres y  dos  para ambos sexos. También ofrece n área de comedor con bancas y anafres, para que los peregrinos guisen o calienten sus alimentos.

En el caso de los feligreses que llegan con auto, la “Estancia del Peregrino” cuenta con 120 cajones de estacionamiento.

Respecto a la seguridad en el lugar, a la estancia se encuentran asignados cuatro elementos de la Policía Auxiliar.

Peregrinos apoyan los cambios

Tras el cambio de administración, los primeros en reconocer las mejoras en la estancia son los peregrinos. “Ahora todo está más coordinado, más limpio. Antes nos cobraban 50 pesos por carro y tres por entrar al baño, por eso algunas veces nos teníamos que quedar en la calle”, coinciden Silvestre Martínez y Guillermo Castro, peregrinos que asisten a la Basílica desde hace 6 años, provenientes de San Buenaventura Nealtican, Puebla.

“Antes, por dos carros y una camioneta que traíamos, pagábamos más de mil pesos  y ahora no nos cobran”, señala la señora Juana, de Tehuacán, Puebla, quien asiste a la Basílica desde hace 24 años.

Pero no todo son halagos para la “Estancia del Peregrino”, ya que algunos peregrinos coinciden en la falta de agua y conexiones eléctricas en el lugar.

(Óscar Santillán)