Tal vez en tu última vista por las calles de Polanco maldijiste a los parquímetros por tener que pagar 27 pesos por las tres horas que te aventaste en la comida, pero más allá del gasto económico hay otros factores que te podrían hacer reconsiderar tu postura.
Cuando se introdujeron en esta ciudad, se redujo de 10 a 3 millones el número de recorridos debido a la búsqueda de lugares para estacionarse.
Según el estudio publicado por la organización internacional ITDP, los parquímetros ayudan además a crear calles más seguras y organizadas, además mejora la calidad de aire en las ciudades.
Cuando el precio es la clave
Si los parquímetros fueran baratos no tendrían razón de ser, ya que serían demasiado accesibles y nadie dudaría en realizar el gasto.
El precio incide en las decisiones de los automovilistas para sacar su automóvil.
Otros factores que determinantes para los conductores son las formas de pago y la seguridad, nadie dejaría su automóvil en la zona más conflictiva de la Ciudad de México.
Más ventajas
Inversión: cuando el operador de este servicio es el Gobierno, el dinero recaudado se puede utilizar para inversiones en la misma zona como los espacios públicos.
Más espacios libres: Evita que los automóviles invadan espacios como parques, banquetas, camellones y dificulten el paso de peatones y ciclistas.