El ambulantaje del Centro Histórico es uno de los mejor organizados del país. Su estructura es piramidal, en cuya cima están los caciques y hasta abajo personas que venden en condiciones deplorables, incluso arriesgando la vida.
Así que está el sujeto que se encarga de presionar a los del peldaño más bajo para que paguen sus cuotas: “los toreros” o aquellos que se encargan de avisar el momento justo en que está a punto de realizarse un operativo policial fuera de lo previsto.
En 2007 la administración de Marcelo Ebrard emprendió el proceso para reubicar en plazas al comercio irregular del Centro Histórico, en principio para liberar las calles pero también para inhibir lo cacicazgos y el consecuente abuso de las personas.
A seis años de distancia y ya con otro gobierno: el de Miguel Ángel Mancera, todo se descompuso, pues nuevos y viejos vendedores llegaron a las calles del primer cuadro de la ciudad y las plazas casi son historia.
Recientemente un nuevo peldaño se sumó a la lista del comercio informal, uno todavía más bajo que el de los “toreros” los llaman “los de la calle”. Son personas que se instalan en el arroyo vehicular de Anillo de Circunvalación arriesgando su vida.
Sea como sea en el Centro Histórico todo aquel informal que esté debajo de los líderes tiene la obligación de pagar, con excepción de unos cuentos puestos privilegiados en la estructura como es el caso de “las antenas”, los “cobradores” o “los ajustadores”.
Sin embargo en toda esta red hay puestos que se desconocen por ejemplo aquellos que se dedican a comprar la mercancía que todos debe vender, etcétera.
Los escalafones del ambulantaje
Líder: son pocos los que llegan a esta cúspide Más por Más tiene detectados 16 en el Centro Histórico. Por lo regular este cargo se da por herencia tal es el caso de Miguel Ángel Huerta cuyo padre era vendedor En el Centro Histórico las ganancias de un líder pueden ser millonarias e incluso tienen la posibilidad de vivir de la política como el caso de Alejandra Barrios.
Puestero de plaza: Aproximadamente 10 mil personas están en este sector y ganan desde 500 hasta 5 mil pesos por día en promedio. Forman parte de la reubicación de 2007, algunos de ellos ya se extendieron a la calle.
Puestero de calle: Tiene sus puestos tubulares en la vía pública, no tiene la necesidad de retirar sus estructuras de las calles por acuerdos con la autoridad. Algunos de ellos están asociados con locatarios establecidos, un ejemplo son los de la calle de República de Argentina. Sus ganancias pueden ser de 5 mil pesos por día.
Cobrador: No necesariamente se tuvo que haber empezado desde abajo para llegar a este escalafón pues por lo regular son cargos dados a familiares y amigos directos de los líderes. Como su nombre lo dice su misión es pasar diariamente a recoger las cuotas de cada uno de los agremiados para que no se los lleve la policía. Cobran por comisión entre 2 mil pesos por día.
Ajustador: Es el que se encarga de mediar entre el ambulante y la policía con el fin de que el primero no sea remitido. Mil pesos diarios en promedio.
Antena: Son jóvenes que llevan un walkie talkie en el hombro, escondido bajo la camisa. Se encargan de avisar sobre operativos no acordados previamente con los líderes. Trabajan sobre todo en las inmediaciones de la Catedral Metropolitana y ya empiezan a involucrarse en este escalafón incluso los boleros del Zócalo. Reciben de 400 a 900 pesos por su servicios.
Torero: Actualmente conforman este escalafón la mayoría de los ambulantes del Centro Histórico. Es la forma en el que la mayoría entra a la informalidad pagando una cuota de 100 y hasta 200 pesos por día y tiene que rentar una bodega obligatoriamente por 50 pesos. Sus ganancias pueden ser de los 100 a los 400 pesos por día.
“El de le calle”: Apenas surgió hace un par de meses este escalafón, es el más bajo de todos porque venden sobre el arroyo vehicular de Anillo de Circunvalación arriesgando su vida. Pagan 50 pesos por este derecho y ganan como máximo 200 pesos por día.
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