Tras el desalojo de los maestros de la CNTE, el jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, dijo que en todo este conflicto se evitaron confrontaciones mayores gracias al diálogo que siempre privilegió si administración.
“El día de hoy se presentó una coyuntura en donde ante la necesidad de la realización de las fiestas del 15 y 16 de septiembre se requería la utilización de la plancha del Zócalo”, reconoce Mancera, quien asegura que se solicitó a los maestros que se encontraban aún en la plancha, se trasladaran hacia otro sitio dentro del mismo Distrito Federal.
Ante la negativa, el secretario de Gobierno del Estado de Oaxaca, un representante de la Policía Federal y secretario Gobierno del DF, hablaron con los profesores a fin de evitar una posible confrontación, como no se dio el desalojo, la consecuencia fue la entrada de la policía federal.
Los hechos lamentables
“Se encontró resistencia según vimos y supimos por parte de otros grupos; de grupos que enfrentaron a la policía y que pues desafortunadamente marcaron escenas que han quedado registradas ya en los medios de comunicación”, mencionó Mancera sobre los encuentros violentos.
Además del conflicto en el Zócalo, informó el mandatario, hubo en paralelo cinco bloqueos en diversos puntos de la ciudad, con diferentes manifestantes y “en todos se resolvió la conflictiva y se logró la liberación de las vialidades”, así como la salida pacífica de la mayoría de los manifestantes hacia el Monumento a la Revolución.
Mancera lamenta que hayan ocurrido choques y ataques entre ambos bandos, informó las autoridades federales arrojan que hay un grupo de personas que han sido puestas a disposición de la autoridad federal y que dentro de este grupo no se encuentran maestros.
(Cristina Salmerón)