Extranjerxs varadxs en albergues de la CDMX no pierden el tiempo e intentan llegar a la frontera antes del 20 de enero
Por Juana García
Cientos de familias migrantes intentan cruzar la frontera de México a Estados Unidos antes de la toma de protesta del presidente electo Donald Trump, el 20 de enero. Esto ha provocado que los albergues de la CDMX por ahora luzcan vacíos, aunque se prevé que vuelvan a llenarse en las próximas semanas cuando las deportaciones masivas anunciadas por el magnate republicano se hagan realidad.
“Las estancias [en los albergues] son más cortas porque la idea es que ellos lleguen a Estados Unidos e intenten cruzar la frontera antes de la toma de protesta de Donald Trump. Hay mucha preocupación”, indica Guadalupe Beltrán, del área de Formación de la Casa de Acogida, Formación y Empoderamiento de la Mujer Internacional y Nacional (Cafemin).
A inicios de diciembre del año pasado, albergues como el de la Cafemin estaban incluso sobresaturados (170 extranjerxs de diversas nacionalidades para un lugar con capacidad para 100), pero la afluencia comenzó a disminuir debido a que lxs migrantes no quieren perder tiempo en su camino hacia la frontera norte de México, donde esperan llegar antes de que Trump arribe por segunda ocasión a la Casa Blanca.
“No ha habido tanta gente, pero prevemos que habrá un aumento en las próximas semanas por las deportaciones”, indica Guadalupe a + Chilango diario, quien se muestra preocupada por lo que pasará con las familias migrantes.
En esto coincide el monitoreo de una red de 23 albergues de contención de familias migrantes ubicados desde la frontera sur hasta el norte del país. La organización ha observado que existe una disminución en el flujo de personas con estatus irregular que transitan por la Ciudad de México, mientras que la mayoría se concentra cerca de la frontera con Estados Unidos.
“Aunque se está registrando la salida de grupos numerosos a manera de caravanas, están siendo disueltas desde la frontera sur por las estrategias del gobierno de México, eso hace que se fragmenten las caravanas y no avancen en grupos. Pero, además, los que ya avanzaron ya están en la parte norte”, detalla Sergio Luna, coordinador de Incidencia de la Red de Documentación de las Organizaciones Defensoras de Migrantes (Redodem) y director del albergue La Sagrada Familia, ubicado en Tlaxcala.
De acuerdo con la red de albergues, los años con mayor número de migrantes en estas estancias fueron del 2020 al 2023. Sólo en las instalaciones de la Cafemin se alojaron hasta 800 personas. “Era demasiada gente, mucha gente venezolana y haitiana, el gobierno mexicano tuvo que abrir campamentos en otros espacios, por eso hay nuevos asentamientos de migrantes en la Ciudad de México”, explica Luz María, coordinadora de proyectos de esta fundación.
Y agrega que “las organizaciones son las que están sosteniendo esta crisis humanitaria, donde los derechos de las personas son vulnerados todo el tiempo”.
Sin políticas migratorias
Entre enero y mayo del 2024, el Instituto Nacional de Migración (INM) registró 1 millón 393 mil 683 personas en situación migratoria irregular, provenientes de 177 países de los cinco continentes, principalmente de Venezuela, Guatemala y Honduras.
Sergio Luna, coordinador de Incidencia de la Redodem, advierte el evidente incremento del número de familias migrantes en el país, principalmente en la Ciudad de México y Puebla. Y con ello, un vacío en las políticas públicas migratorias para contener y garantizar sus derechos básicos.
Las rutas migrantes también se han diversificado. “No están transitando en rutas comunes como era Tlaxcala o Hidalgo, esto porque se han instalado numerosas operaciones de migración, lo que hace que las familias queden más expuestas a los grupos de tráfico de personas, además de no recibir ayuda humanitaria en los albergues”, añade Luna.
“Desde el sexenio anterior y el inició de este no ha habido condiciones para entablar un diálogo respetuoso y colaborativo. Si no hay una disposición por dialogar, mucho menos para contribuir con la atención de la asistencia humanitaria a estas personas”.
En algunos estados hay albergues de asistencia humanitaria coordinados con los municipios y con el gobierno federal, pero son insuficientes. En este contexto, lxs entrevistadxs denuncian que lo que existe es una política de detención migratoria que cada vez se ha ido militarizando más. “Por eso decimos que urge sentarse a diseñar políticas públicas con un enfoque humanitario, porque esta población requiere una respuesta de atención humanitaria y no de deportación”.
La Cafemin también hace una llamada para ampliar la capacidad de los albergues de acogida en la Ciudad de México, además de la apertura de más espacios que garanticen la protección y seguridad para las personas en situación de movilidad, su acceso a servicios básicos, así como promover la integración plena de las familias para que puedan disfrutar de sus derechos y acceder a oportunidades de integración con la sociedad mexicana.
- Casi 1.4 millones de personas en situación migratoria irregular contabilizó el INM entre enero y mayo de 2024
- De 177 países provienen lxs extranjeros detectados por el INM, principalmente de Venezuela, Guatemala y Honduras