“Yo no vengo aquí a ver por mi futuro, tengo que trabajar por el futuro de ustedes, de la ciudad. No protesté la encomienda que se me dio en esta ciudad para administrar una imagen, la acepté para gobernar”, así concluyó el jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, su discurso de primer año de gobierno en el Auditorio Nacional.
Esto, fue dicho a raíz de las críticas recibidas por las marchas y manifestaciones que han dañado a la Ciudad de México y, por lo tanto, a su administración: “Mucho he tenido que trabajar y mucho ha tenido que trabajar la ciudadanía de esta capital, hemos sido escenario de diferentes planteamientos políticos, de cambios estructurales en el país”.
A la vez, Mancera reconoció que no ha tenido un inicio sencillo: “Este primer año ha sido duro, ha sido necesario un trabajo constante para sentar bases en la ciudad de lo que queremos hacer y lo que aspiramos”. Añadió que no se puede permitir que la violencia “destruya lo que hemos construido con paciencia y con reflexión”, sobre todo en materia de derechos.
El mensaje
Por pocos minutos más de una hora, el mandatario capitalino dirigió un mensaje a la ciudadanía amén del primer año de su gestión, en él destacó los logros obtenidos en Capital Social, los esfuerzos de movilidad, las obras de mejoramientos barriales, los trabajos en la red de agua, desarrollo económico, en salud y en acuerdos con el gobierno federal como el Fondo de Capitalidad.
Cerca del minuto 20 de su mensaje, Jorge López Munguía, de la Asamblea Contra el Alza del Metro, reclamó con gritos a Mancera por el incremento a la tarifa del Metro, aseguró que la encuesta para aceptarlo fue una farsa, pero las porras al mandatario por parte de los integrantes del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del DF y las gentes de seguridad, lograron callarlo y sacarlo del lugar.
Ante la interrupción, el jefe de gobierno dijo que su solicitud sería escuchada y prosiguió con su mensaje.
Lo que viene
Como anuncios nuevos, Mancera dijo que para el próximo año se puede esperar el inicio de la ampliación de la línea 12 del Metro (de Mixcoac hacia Observatorio), la construcción de la Línea 6 del Metrobús y 200 nuevas cicloestaciones dentro del sistema Ecobici en la delegación Benito Juárez.
En el tema de seguridad, anunció que uno de cada tres hogares en la ciudad tendrá alarmas vecinales, pero además se instalará un Centro de Monitoreo que las atienda y envíe personal al lugar donde se necesita.
La fiesta
La cita fue a las 10:30 horas, pero antes de las 10 horas, afuera del Auditorio Nacional, miembros del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del DF ya gritaban repetidamente “¡Manceeeeraaa, Manceeeraaa!” con pancartas color naranja, más tarde estos ocuparon la planta más alta del recinto para decir a coro esta misma letanía en momentos clave del mensaje del mandatario.
Los políticos, funcionarios y empresarios fueron ocupando la planta baja del auditorio, estuvieron los 16 jefes delegacionales, los secretario de gobierno y el gabinete ampliado, asambleístas de todas la bancadas y hasta Isabel Miranda de Wallace, quien fue contrincante de Mancera en la elección para la jefatura de gobierno.
Mientras no aparecía “el jefe”, la cantante Regina Orozco amenizó la espera con su potente voz acompañada del “Mariachi Guardia Nacional”, formado por policías de la Secretaria de Seguridad Pública del DF que le saben bien a la música vernácula.
Cuando por fin salió Miguel Ángel Mancera al escenario, éste destacó la presencia de Cuauhtémoc Cárdenas, encargado de Relaciones Internacionales de DF, el rector de la UNAM, José Narro Robles así como a líderes religiosos como Antonio Chedraoui, de la iglesia ortodoxa y el presidente nacional del PRD Jesús Zambrano.
Arropado por un escenario totalmente blanco, Mancera dio un mensaje entre amigos, seguidores y políticos que le reconocen su labor como un mandatario conciliador.