Los diputados locales ya tienen en sus escritorios una propuesta para detener y combatir la proliferación de valet parking pirata.
Presentada por el perredista Adrián Michel el 8 de octubre y turnada a la Comisión de Administración Pública Local, la iniciativa de reformas a la Ley de Establecimientos Mercantiles busca aumentar los requisitos para quienes prestan este servicio, a fin de que el usuario esté más tranquilo.
De aprobarse el proyecto, el comprobante que los acomodadores entregan a los automovilistas deberá tener, al menos, razón social, para conocer a la persona física o moral responsable del servicio; tarifa, con el fin de cumplir con informar al usuario el costo; ubicación del inmueble al que se llevará el vehículo –la iniciativa recuerda que una de las obligaciones de los valets es contar con un inmueble propio o rentado donde se resguarden los autos, lo que en la actualidad no se cumple—y las condiciones en que se recibe.
“Tiene que ver con algunas responsabilidades que deberían asumir las empresas que prestan el servicio y que no lo están haciendo a la fecha”, justificó Michel.
La insuficiente capacidad para levantar infracciones por parte de la SSP y las facilidad de las empresas para violar el Reglamento de Tránsito son factores que contribuyen al desorden de estos negocios, según el legislador.
Y por ello propone una regulación más estricta, que incluiría sancionar con una multa de 8 a 22 mil pesos a quienes incumplan con las disposiciones que ya contempla la ley en su artículo 53: que el titular del establecimiento sea obligado solidario por cualquier daño o robo de los acomodadores, que el personal del valet tenga licencia de manejo vigente, uniforme e identificación y que no estacione los vehículos en la vía pública o banquetas.
También busca hacer más clara la obligación de que las empresas cuenten con un inmueble para estacionar los vehículos y que el seguro de responsabilidad o fianza contra los daños sea de hasta 10 mil días de salario mínimo vigente en el DF, es decir, casi 650 mil pesos.
MÁS ESTACIONAMIENTOS
El problema de los valet parking está relacionado con un déficit de estacionamientos, que se debe a que las figuras con las que cuenta el DF dificultan la inversión y operación de estos giros.
En algunas zonas, tener pocos estacionamientos es un incentivo para no utilizar el auto, aseguró Michel.
“Pero hay otras que requieren un mayor número de estacionamientos. En ese sentido, habría que revisar muy bien el mecanismo a través del cual la ciudad pueda otorgar facilidades para la inversión de particulares en los temas de construcción y operación de estacionamientos”, comentó.
Las figuras que presisten hasta ahora son el Permiso de Administración Temporal Revocable, que se otorga por 10 años –y no es tiempo suficiente para amortizar la inversión— y la concesión, cuyo trámite es complicado y arriesgado, porque no hay certeza de ganar la licitación.
“Ese fue un dilema en el cual nos vimos nosotros en la anterior administración. Había un programa muy ambicioso por parte de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda, y coadyuvando con la Oficialía Mayor, para incrementar el número de estacionamientos a petición de la Delegación Miguel Hidalgo. En ese entonces el delegado se acercó con el gobierno de la ciudad, había algunos proyectos de inversión, pero las figuras que teníamos a la mano no fueron satisfactorias para echar a andar este gran proceso”, relató Michel.
La nueva Ley de Movilidad que se está trabajando en la Asamblea Legislativa, aclaró, abordará este tema y la Secretaría de Transporte y Vialidad tiene ya presente la dificultad del gobierno para fomentar la participación privada en estacionamientos.
(MARCELA NOCHEBUENA Y JOSUÉ HUERTA)