Los diputados del Partido Acción Nacional de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal mostraron su rechazo ante el alza a la tarifa del Metro, que podría ser de uno o dos pesos, pero esto no garantizaría un mejor servicio, advirtió Federico Döring, coordinador de estos asambleístas.
Döring explicó que un aumento así se debe consultar con la ciudadanía, como lo hizo el ex jefe de gobierno del DF, Andrés Manuel López Obrador, por lo que invitan al mandatario actual, Miguel Ángel Mancera, para que haga lo mismo.
La diputada Laura Ballesteros dijo que el 70% de los habitantes del DF utilizan el transporte público, y con este aumento de tarifa, se estaría afectando a ese porcentaje de la población.
Exigen diálogo
Los legisladores hicieron un llamado al director del Sistema de Transporte Colectivo Metro (STCM), Joel Ortega, para que dialogue con los diputados y exista un compromiso previo, con puntos expresos donde se diga cómo va a mejorar el servicio si es que sube la tarifa.
“Necesitamos saber exactamente en qué se va a gastar, cómo va a ser la supervisión y lo más importante, es que se tiene que someter a una consulta con las personas, la gente más pobre de la ciudad, sin aumento, gasta actualmente 43% de su salario en transporte público”, explico la diputada.
Ambos exigieron conocer el plan integrado de la Secretaría de Transporte y Vialidad capitalina que aún o se ha dado a conocer, de qué manera éste se estaría integrando al aumento del precio del viaje en Metro, cómo se verá reflejado en la estrategia de movilidad de la ciudad y sobre todo en la atención que el STCM dará a sus miles de usuarios.
Hay dinero en el Metro
Aunque los legisladores no pudieron responder puntualmente sobre las propuestas que tendrían para recaudar dinero sin considerar un alza de tarifa, la diputada Ballesteros sugirió que una forma de hacerse de dinero sin castigar al usuario es por medio de aquellas estaciones del metro, tren ligero y Metrobús que hacen menciones a la iniciativa privada.
“En otros países se cobra hasta dos o cuatro millones de dólares por que una estación lleve el nombre de una empresa privada. Esto ya sucede en la ciudad y el Metro no ha visto un peso de esta situación”, explicó amen de la estación Ferrería que ya también se llama “Arena Ciudad de México”, complejo de espectáculos de capital privado.
Otra de las exigencias de los asambleístas fue que además de aumentar o no la tarifa, una de las estrategias para darle mayor calidad al servicio y más recaudación, es aumentar el número de usuarios y redensificar las zonas alrededor de las estaciones del Metro.
(Cristina Salmerón)