El estrés hídrico es una realidad a nivel mundial.
De acuerdo a expertos en el tema el estrés hídrico se produce cuando la demanda de agua potable es más alta que la cantidad disponible. Puede darse porque la calidad es tan baja que su uso no es apto para el consumo humano.
Estas situaciones ya están siendo más comunes en todas las entidades de la república. Está en nuestras manos aportar, prevenir y cuidar para mantener el cuidado del vital líquido.
Aquí te compartimos 3 prevenciones que tienes que seguir:
Evita el gasto innecesario de agua:
Mientras te bañas, te estas aseando, rasurando o realizando otras actividades como lavar los platos o ropa, cierra la llave, evita los goteos. No laves el coche con manguera. Trata de utilizar el lavado de autos, pues aún cuando suelen ser más caros, son mucho más eficientes en el consumo de agua.
Dato curioso: Sabías que un goteo puede llegar a consumir entre entre 50 y 100 litros al mes.
Usa el sanitario correctamente:
Revisa periódicamente que el flotador esté funcionando correctamente, que el agua no se fugue por el rebosadero y que la tapa o cono sellen bien. Es importante no usar el sanitario como basurero, ni como depósito de pañales o toallas sanitarias.
Revisa Fugas:
Revise los empaques de tus llaves al menos 2 veces por año, usualmente estos empaques representan un serio problema de fuga de agua.
Dato curioso: Sabías que una fuga del sanitario puede representar el desperdicio de 100 a 1,000 litros diarios de agua.
Las fugas que notamos en la calle también son problema nuestro y es nuestra tarea reportarlas.
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