Dado que no existe alguna legislación que prohíba grabar a algún elemento de la Policía Preventiva en cumplimiento del servicio público, los ciudadanos pueden grabar a un policía, siempre y cuando no se viole la ley mientras se esté grabando.
Por eso, si quieres documentar las acciones de un policía debes tomar en cuenta lo siguiente:
- Debes mantenerte a cierta distancia y no violar el perímetro que establezcan los agentes, sea con una cinta o de manera verbal. De lo contrario, podrías contaminar la escena de un posible delito.
- No debes interferir en detenciones y, si tú eres la persona multada o detenida, es tu derecho grabar la situación. Derechos Humanos recomienda no resistirse al arresto y exigir ser llevado de inmediato al Ministerio Público o al juez cívico.
- Los policías no tienen permitido quitarte equipo, videos o fotografías. Tampoco pueden pedirte borrarlas. Si lo hacen, puedes presentar una queja ante la propia Secretaría de Seguridad Pública u otras instancias.
- La policía también puede grabar a los ciudadanos con teléfonos u otros dispositivos, como las cámaras que algunos oficiales capitalinos tienen adheridas a sus uniformes para grabar las detenciones que realizan.
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Desde noviembre del año pasado, la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México ha difundido dos folletos que contienen información sobre qué hacer o no hacer durante detenciones arbitrarias y en el ejercicio a la libertad de expresión, a través de la documentación ciudadana.
De acuerdo con los artículos sexto y séptimo de la Constitución Política, grabar a los policías durante el ejercicio de sus funciones está protegido por las libertades de expresión, difusión e información, por lo que los policías no pueden quitarte el celular o equipo con que grabas.
De forma que la Comisión de Derechos Humanos capitalina consideró, en una recomendación emitida en 2014 a la Secretaría de Seguridad Pública, que autoridades no pueden obstaculizar el derecho a la libertad de expresión en casos como:
- Actos de amenaza, intimidación y agresiones, en agravio de las y los ciudadanos y, particularmente, de los operadores de los medios de comunicación, cuando documentan actuaciones de los cuerpos policiacos, que pudieran constituir violaciones a derechos humanos, e inclusive conductas delictivas.
- En algunos casos tratos crueles, inhumanos o degradantes, a fin de retirar a dichas personas, el material video gráfico en el que se documentan dichos actos de autoridad.
- El uso indebido de sus atribuciones como cuerpos encargados de hacer cumplir la ley, y la utilización inadecuada del derecho penal, para criminalizar los derechos de las personas a obtener información, efectuando en muchos casos detenciones arbitrarias.
(Información: CDH/ Foto: Cuartoscuro/Archivo)