Ahí estaba, en primera fila y al lado del presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, Edgar Elías Azar, sí, Martha Sahagún, la esposa del expresidente Vicente Fox, que escuchaba las palabras de Miguel Ángel Mancera al presentar el Consejo Consultivo de la empresa Calidad de Vida, Progreso y Desarrollo.
Al ser abordada por los medios de comunicación, la exprimera dama se limitó a decir que solo era una invitada, y que el Centro Fox, la consultoría que dirige con su esposo, “trabaja y siempre trabajará a favor de las causas nobles y buenas para las personas”.
Este encuentro resultó sorpresivo porque desde el año 2000, la relación entre los presidentes y los jefes de Gobierno del Distrito Federal fue distante, ya que hubo siempre diferencias que hasta ahora parecían irreconciliables entre los gobiernos de izquierda en la capital y los panistas que entonces ostentaban el federal.