Esto se logró a través de un programa de monitoreo mediante cámaras trampa, con el que también se avistaron otras especies
La Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México, a través de la Dirección General del Sistema de Áreas Naturales Protegidas y Áreas de Valor Ambiental, reveló que el coatí de nariz blanca (que usualmente vive en hábitats boscosos templados y tropicales) fue registrado por primera vez en el Parque Nacional Desierto de los Leones.
Esto se logró a través de un programa de monitoreo mediante cámaras trampa, con lo que suman 2 mil 501 avistamientos de distintas especies de fauna silvestre entre julio de 2021 y octubre de 2023.
De acuerdo con la Lista Roja de las Especies y la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) el rango de distribución de dicha especie dentro de la Ciudad de México corresponde principalmente a la región suroriente que incluye a Milpa Alta, Xochimilco y Tláhuac, por lo cual este avistamiento es inusual en la Zona Poniente de la Ciudad de México.
La dependencia explicó que durante ese periodo se registraron 34 especies diferentes: 19 de aves y 15 de mamíferos; además, destacó 109 de lince americano, 44 de coyote, 129 de venado cola blanca, uno de armadillo nueve bandas, 121 de cacomixtle norteño, 668 de conejo y 69 de zorra gris, especie que no se encuentra en el programa de conservación y manejo de dicho parque.
Además se han registrado aves como chara copetona, rascador cejas verdes, tecolote, gallina de monte, mirlo garganta blanca, mirlo primavera, sastrecillo, mulato azul, picogordo tigrillo, pavito alas negras, bajapalos enano, junco ojos de lumbre, carpintero de pechera común, colibrí garganta azul, Clarín jilguero y golondrina tijereta.
Como parte del Programa de Monitoreo de la Biodiversidad en la Ciudad de México, en julio de este año comenzó el monitoreo de mamíferos medianos y grandes en el Área Natural Protegida Parque Nacional Insurgente Miguel Hidalgo y Costilla, donde fueron colocadas las primeras cincos cámaras trampa. El objetivo es colocar 11 cámaras que abarquen las 525.048 hectáreas de la superficie decretada dentro de la Ciudad de México.