En la capital no solamente se gradúan los humanos, pues también hay cursos intensivos para que los perros puedan servir de ojos a quienes padecen de debilidad visual, y ellos también obtienen su ceremonia de graduación.
Este fin de semana seis canes concluyeron el programa que ofrece la Escuela para Entrenamiento de Perros Guía, que se encuentra ubicada en Avenida Canal Nacional 1075, colonia Villa Quietud, en la delegación Coyoacán.
La directora general de la institución, Silvia Lozada, recordó que cada año se gradúan 15 canes, por lo que se necesitó cerca de 3 millones de pesos para lograr instruirlos en las técnicas necesarias para guiar a los humanos en sus trayectos.
Este año las personas beneficiadas fueron: el líder de proyectos cinematográficos para invidentes, Jorge Lanzagorta, que recibió a su perra guía Fey; además del empresario y músico Josué Infante, quien recibirá la ayuda de Lindy.
También se entregaron a los canes entrenados Friend, Eiry y Elmo al analista de sistemas Carlos Hernández, el estudiante José Manuel Flores y a Karlo Salvador Mireles, quienes agradecieron el apoyo de la institución.
Desde la cuna
El proceso de entrenamiento comienza desde las seis semanas de vida de los cachorros, de ahí la escuela busca voluntarios para que los adopten durante un año y así aprendan a socializar con una familia.
Después de un año de haber sido adoptados, regresan a la escuela para que aprendan a guiar a las personas con discapacidad visual, aprendiendo a evitar obstáculos como banquetas y postes para facilitar la caminata de su dueño.
Desde que inició labores la escuela de entrenamiento, en 1989, se han entregado más de 200 perros guía a mexicanos que no pueden ver o tienen una deficiencia ocular que les impide moverse adecuadamente en su entorno.
De acuerdo con Lozada, el caso del Distrito Federal es especial, pues considera que la ciudad no está diseñada para quienes no pueden ver, con banquetas en mal estado y muy pocos semáforos sonoros que los ayuden a cruzar la calle.
(Ignacio Gómez)