“Te recomiendo el condón, no sólo es el más seguro en cuestión de embarazos, sino que te protege de enfermedades de transmisión sexual como el VIH”, así respondió la voz al otro lado de la línea.
“Estoy empezando a tener relaciones sexuales, ¿qué método anticonceptivo debería utilizar?”, le pregunto.
“Condón”, repite. Ésta fue la respuesta de la única encargada de contestar el teléfono de SexoTel, un servicio telefónico que ofrece la delegación Miguel Hidalgo para dar información y orientación sobre sexualidad a jóvenes.
Viacrucis telefónico
A pesar de lo sencillo que debería ser hablar por teléfono a un servicio que ofrece el gobierno, fueron 9 llamadas las que hice antes de que me contestaran.
Después de un rato, la voz de una mujer se escucha en la distancia y comienzo la entrevista.
Una vida ficticia: una joven de 18 años que comenzaba a tener relaciones sexuales con su pareja y quería saber qué método era el más adecuado.
“Antes de usarlo debes verificar la fecha de caducidad”, me recomienda y me explica la forma correcta en la que debe ir el condón.
Entonces le pregunto si era una ginecóloga o por qué era la encargada de esta área.
Me explica que es psicóloga especializada en problemas de adolescentes y jóvenes, pero podía dar consejos a personas jóvenes pero también a señoras adultas.
“Si tengo otras dudas y hablo otra vez a la línea, qué puedo hacer para que me contestes tú”, le digo intrigada.
“Por ahora yo soy la única que atiende los llamados, esto es un programa que comenzó hace muy poco y no hay muchas personas capacitadas para responder a estas llamadas”, añade.
Ya quiero colgar, las respuesta que me da son muy de libros de secundaria y yo esperaba que fueran más abiertos.
Me despido. Ella me retiene en la línea dos minutos más. Me pregunta cómo fue que escuché de SexoTel, y de qué delegación y colonia llamaba.
(DANIELA A. MACHADO | MÁS POR MÁS)