Hace varios meses me encontré una nota en el NY Times (bueno, en su sección de blogs) sobre una revista culinaria llamada Swallow, que anunciaba su siguiente número sería, dedicado por completo a la ciudad de México.
Es apenas la tercera entrega de una premiada publicación que en realidad parece mas libro de arte que revista de comida. El primero fue sobre la escena restaurantera escandinava y el segundo era una guía sobre las escalas el recorrido del expreso trans siberiano.
En la nota decía que se habían tardado mas de un año en su producción ya que, entre otras cosas, le encargaron a un experto en fragancias (Sissel Tolaas) que desarrollara rascahueles (es decir, estampas con olor) de 20 diferentes barrios del D.F., lo cual, como podrán imaginarse, toma tiempo.
Hace unos días ya tuve un ejemplar de la revista en mis manos. Lo encontré en la esplendida Librería Bosques de la colonia Roma y, aunque costó una pequeña fortuna, no me dolió el codo. Es una maravilla que vale cada peso.
Lo primero que me llamó la atención fue el nivel de sus colaboradores. Cuenta con textos de escritores muy admirados como Daniel Hernández (flamante editor de Vice México), Hamish Anderson, Brenda Lozano y David Lida, entre otros. También son parte del proyecto artistas de renombre como Francis Alÿs, Miguel Calderón, Artemio y Nacho Perales, delantero de Los Pellejos. Desde ahí se nota la clara intención de sus editores de ligar la comida con la cultura, lo cual logran con mucho éxito.
Pero mas allá de los nombres, es impresionante la calidad de sus textos, de sus fotografías, su diseño y, sobre todo, la forma en la que decidieron presentarle al mundo la oferta gastronómica de nuestra ciudad, poniendo al mismo nivel la comida callejera con la que se ofrece en nuestros mejores restaurantes. Tiene sentido: en ambos rumbos tenemos representantes dignísimos.
Además de los de siempre (Elena Reygadas de Rosetta, Enrique Olvera de Pujol, Jair Tellez de Merotoro y así), Swallow incluye entrevistas con expertos tipo Diana Kennedy, exiliados distinguidos como Michael Nyman, taqueros y torteros.
Ferrán Adriá (otrora cabecilla del Buli, considerado el mejor chef del mundo) habla de sus excursiones a Azcapotzalco para comer en El Bajío original. Silverio, el músico que suele acabar sus conciertos en una tanga roja (imagen para quitarle el apetito a cualquiera) exalta las virtudes de las hamburguesas de Kelly’s. Artemio hace una guía muy divertida de changarros ricos pero de muy alto riego. Un grupo de taxistas hablan de sus taquerías favoritas. Para los extranjeros hay recetas de platos típicos, explicaciones sobre los pilares de nuestra alimentación y un articulo del tequila contra el mezcal.
Mas allá de consigan la revista o no, se trata de otra confirmación de que, para el gourmet y para el glotón, este lugar en el que nos tocó vivir es un verdadero paraíso.
¡Anímate y Opina!
*Rulo, Raúl David Vázquez, director editorial de La Semana de Frente. Locutor en Reactor 105
(RULO)