TRATAR CON PERSONAS CON DISCAPACIDAD FÍSICA:
-No le pida a una persona en silla de ruedas que le sostenga algo, respete su espacio personal, no son objetos.
-Las personas que usan bastones o muletas necesitan los brazos para mantener el equilibrio, por lo tanto, jamás las agarre de los brazos.
-Mantengamos las rampas y las puertas con accesos para sillas de ruedas sin trabas ni obstáculos.
-La silla de ruedas es lo que permite a esa persona moverse y participar en la sociedad; es un elemento de liberación, no de confinamiento.
-Las personas con discapacidad saben mejor que nadie lo que pueden o no hacer, no decida por ellas acerca de su participación en cualquier actividad.
-Siempre diríjase directamente a la persona con una discapacidad, no a su acompañante, ni a su ayudante.
-Evite dar palmadas a las personas en la cabeza o tocar su silla de ruedas, escúter o bastón, estos elementos son parte de su espacio personal.
TRATAR CON PERSONAS CON DISCAPACIDAD MENTAL O PROBLEMAS DE CONDUCTUALES:
-Una persona con lesión cerebral quizá no pueda seguir indicaciones debido a que no puede retener información, o no puede orientarse.
-Las personas con dislexia u otras discapacidades de lectura tienen problemas para leer la información escrita, puede ayudarle darle las indicaciones verbalmente.
-En algunos casos es importante hacer contacto visual y al mismo tiempo tocar su mano, su hombro o su brazo para obtener atención absoluta y garantizar el resultado.
-Algunas veces, sobre todo si es un lugar nuevo, necesitan espacio para conocer y tiempo para poderse adaptar al nuevo entorno, démosle ese tiempo y espacio personal para hacerlos sentir tranquilos y seguros.
-No todas las discapacidades son evidentes, una persona que actúa de alguna forma que le resulte extraña, podría tener una discapacidad intelectual.
Muchas veces, se confunde la mala educación con los problemas de conducta.
Y si alguna vez se siente inseguro acerca de qué hacer o decir a una persona con una discapacidad ¡simplemente pregunte!
Ellos se lo agradecerán.