Una ciudad sedienta

Más de 16 mil litros de agua podrían ahorrarse durante cada segundo que pasa en el Distrito Federal si se llegaran a aplicar una serie de alternativas sustentables enfocadas en la sustentabilidad y en la generación de conciencia social.

De acuerdo con el investigador de la Unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Eugenio Gómez Reyes, existen cuatro métodos que podrían ayudar a solventar la crisis hídrica que se vive en la metrópoli.

A CUENTAGOTAS

La primera consiste en la recuperación de volúmenes de agua que se pierden a en fugas. De aplicarse, se recuperarían 11.409 metros cúbicos de recurso por segundo, equivalente al agua que se extrae de la cuenca de Lerma.

La segunda es el aprovechamiento pluvial a través de pozos de absorción, es decir, la cosecha de lluvias. En la ciudad existe potencial para recuperar hasta 5.5 metros cúbicos de agua por segundo a través de esta vía.

El tratamiento de aguas residuales es una de las alternativas sustentables más beneficiosas, pues podrían obtenerse cerca de 27 metros cúbicos de agua por segundo en caso de que se pudiera concretar esta acción, dijo Gómez Reyes.

Por último se encuentra el desarrollo de aplicaciones tecnológicas para el ahorro del líquido. El potencial de esta medida permitiría que mediante haya una reducción de hasta 80% del uso de agua que se consume en una vivienda.

El profesor del Departamento de Ingeniería de Procesos e Hidráulica aseguró que con este desarrollo se ahorrarían hasta 27 mil litros de agua por segundo, casi el triple de la que se extrae actualmente del sistema Lerma.

Si bien, la suma de todas las alternativas otorgaría cerca de 33 mil litros por segundo de agua a la Ciudad de México, el investigador consideró que una meta viable sería lograr la mitad de todos los objetivos, ahorrando hasta 16 m3/s.

¿SUBIR EL PRECIO?

Para el especialista, incrementar el costo por el consumo de agua no es la solución para combatir la crisis hídrica, ya que consideró que esta medida no ha generado conciencia entre los ciudadanos que tienen mayores recursos y ejercen el gasto sin mayores problemas a diferencia de quienes viven en pobreza.

Y SI LES CIERRAN LA LLAVE…

Gómez Reyes adelantó que próximamente realizarán una investigación en donde se analizarán los beneficios de retirar los medidores de agua y en su lugar limitar la disponibilidad de líquido a un cierto volumen.

Consideró que podría “cerrarse la llave” a una vivienda cuando ésta supere los 200 litros diarios por habitante, pues en algunas zonas del Oriente de la ciudad solamente hay disponibilidad por 120 litros por habitante.

CIUDAD DESÉRTICA

Por su parte, el rector de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) Enrique Dussel, propuso que se utilice mayor vegetación desértica en la metrópoli, la cual requiere menos agua para sobrevivir y también es estética.

RESPONDE A LA AUTORIDAD

El director de fortalecimiento institucional del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) Miguel Ricaño Escobar, reconoció que el esquema actual de la ciudad de explotación de acuíferos no funciona, aunque dijo que ya hay un plan.

El funcionario indicó que se necesita un programa para renovar la infraestructura hídrica, ya que la red de la ciudad tiene entre 50 y 70 años y no se conoce de forma certera cómo se conectan las vías secundarias por el subsuelo.

“Si necesitamos responderle a la ciudad a 120 kilómetros por hora, lo estamos haciendo a 30. Tenemos que hacerlo en 20 y años y tenemos que hacerlo ya”, destacó el servidor público reconocido como “Capitán Tormenta”.

(IGNACIO GÓMEZ)