Las actividades en el onceavo día de cierre de la Torre de Rectoría de la UNAM, tuvieron matices diferentes: desde la aparición de pintas en el asta bandera, el silencio y enojo del rector, José Narro Robles y la petición del Consejo Nacional de Autoridades Educativas para liberar las instalaciones.
La madrugada del martes, apareció una pinta con letras rojas en la base del asta bandera de la explanada de la Torre de Rectoría de la UNAM vandalizada por los encapuchados que tienen tomada las instalaciones.
La oración reza: “El enojo es un mal maquillaje para la tristeza… vivan los estudiantes”, la frase provocó indignación en algunos de los estudiantes universitarios que rechazaron que sea la mejor forma para expresar ideas y menos dañar instalaciones que son Patrimonio de la Humanidad desde 2007.
Cuando hable, los invitaré
Durante su participación en una conferencia en el Jardín Botánico, el rector José Narro Robles se negó a dar algún comentario sobre la toma de Rectoría.
“No voy a hablar, voy a despedir. Ustedes me conocen, cuando digo que no voy a hablar, no voy a hablar. No voy hablar, lo haré pronto y los invitaré”, dijo Narro.
Llamado inédito
El cierre de la Torre de Rectoría provocó reacciones en la Secretaría de Educación Pública (SEP) y de los secretarios de educación del país, quienes se unieron para la petición de liberar lo más pronto posible las instalaciones.
Por medio de un posicionamiento inédito del Consejo Nacional de Autoridades Educativas exhortó a los paristas, que tienen el edificio bajo su control, a no implementar medidas de presión para un diálogo.
“La violencia como mecanismo de presión y resolución de conflictos, que agrede a la comunidad universitaria y a toda la nación”
El Consejo
El Consejo Nacional de Autoridades Educativas está constituido por los 31 gobiernos estatales de la República Mexicana, fueron los que exigieron que los paristas abandonen el edificio.
