Organtech creó un sistema con el que agricultores pueden aprovechar mejor los recursos naturales

Uno de los grandes problemas de la Ciudad de México es la contaminación. Debido a ello y a que se dieron cuenta de que existe una serie de problemas en torno a la producción orgánica agrícola, Ameyalli Villafán, Rocío Arias, Daniel Martínez y Leticia Flores decidieron crear Organtech. Se trata de “un sistema de información que busca dar a conocer cómo es el proceso agrícola orgánico, por medio de la tecnología, en este caso una página de internet”, dice Daniel.

Pero ¿qué es la agricultura orgánica? Son las formas de producción con las que se intenta reducir el impacto ambiental, a través del empleo de todos los recursos naturales con los que cuente el agricultor, además de minimizar o evitar el uso de fertilizantes y plaguicidas.

Organtech es un grupo multidisciplinario que propone “una solución a los problemas a los que se enfrentan los agricultores de Milpa Alta, como el deterioro del suelo, insuficiencia alimentaria, condiciones irregulares y abandono del campo”, comenta Ameyalli, quien es licenciada en Comunicación por la UNAM, al igual que Leticia; Daniel es ingeniero en Sistemas computacionales y Rocío, diseñadora de Comunicación gráfica. “El esfuerzo que estamos haciendo es para que el proyecto sea más robusto”, menciona Rocío.

Aunque el sistema se hizo con base en los problemas que encontraron en el campo de Milpa Alta, Organtech puede ser utilizado en cualquier parte del país. “Lo que hace es dar a las personas toda la información de lo que es la agricultura orgánica, por ejemplo, qué pueden sembrar en cierta temporada del año. Al entrar al sistema, te pide tres datos: dónde estás ubicado, cuándo piensas cultivar y la extensión del terreno donde piensas hacerlo. Con esa información, el sistema te da diferentes opciones”, dicen. “La página es abierta, no tiene ningún costo. Además, está dirigida a distintos públicos: agricultores, especialistas agrónomos y cualquier persona interesada en cultivar alimentos”, explica Daniel. “Es información generalizada, no te da el proceso específico de la lechuga o del jitomate. La parte rica es que todos pueden aportar”, dice Leticia.

El equipo comenta que algo importante de Organtech es que funciona colaborativamente. Parte del contenido la proporcionan los agricultores y es verificada por un experto. Sin embargo, quieren encontrar una ONG o institución que los apoye para dar seguimiento, pues resulta difícil mantener económicamente el proyecto.

“Estamos planeando una primera jornada de agricultura orgánica. Haremos actividades con los agricultores, visitas a huertos y juegos para que los niños aprendan, por ejemplo, a hacer compostas para que vean cómo es esta actividad, que no es ajena a su vida diaria. El fin es acercar a la gente a este terreno. El proyecto tiene un trasfondo de diseño, social y de trabajo en conjunto con la comunidad. Si bien una app no resuelve los problemas ambientales, aporta para resolver una problemática evidente, como la producción de alimento”, comenta Ameyalli.

(Fotos: División de Ciencias de la Comunicación y Diseño DCCD, y Organtech)