Alonso Catalán, un joven escritor que acaba de publicar Mariposas y ruinas —su primer libro— en una edición de autor, habla sobre el inicio de su vocación, los libros que más lo han influido y las emociones abordadas en su escritura.
¿Cómo describes Mariposas y ruinas?
Es un viaje hacia el interior para forjar un sentimiento y un amor, así como el fracaso de la realización de dicho amor. Trata sobre una emoción que naufraga y luego renace de una forma genuina, terrenal, manifestada nuevamente como un viaje hacia el interior; que explota adentro de nosotros, obligándonos a expresarla de inmediato, sin maquillarla o darle muchas vueltas.
¿El amor es el único sentimiento que abordas en esta obra?
No, la duda también tiene un papel muy importante. En particular me refiero a las dudas sobre el camino que se debe tomar en la vida. Otros temas presentes son la nostalgia hacia lo vivido —ese pensar que el pasado siempre fue mejor— y la búsqueda del futuro; respuestas que sabemos que nunca llegarán.
¿Cómo empezaste a escribir?
A los 16 años —cuando uno se siente perdido, rodeado de cambios y en el ambiente de los primeros amores y desamores— empecé a leer poesía y narrativa, y me sentí identificado con lo que acababa de descubrir. De alguna manera, encontré una especie de tregua y eso dio pie para que sintiera la necesidad o el impulso de escribir. Al principio, todo sucedió sin que lo pensara mucho; había descubierto en la escritura una actividad sumamente satisfactoria.
Mi camino de vida no estaba bien definido. Tengo cierta facilidad por la ciencia y las matemáticas, pero siempre ha habido un lado artístico en mí (desde los diez años toco la guitarra, y la música y el lenguaje me apasionan). Además, siempre he sido muy intenso emocionalmente, lleno de pasiones, y la literatura me ayudó a encontrar una manera de identificarme.
Gracias a mi gusto por las matemáticas, empecé a estudiar Ingeniería Industrial. Sin embargo, justo en esa etapa me apasioné con las letras y después de un semestre me salí de la carrera. También fui consciente de que el medio empresarial no me interesaba; ahora estudio Letras Hispánicas en la UNAM.
¿Qué libros o autores te han marcado?
La estación violenta, de Octavio Paz; Los heraldos negros, de César Vallejo; Los placeres prohibidos, de Luis Cernuda, Odas elementales, de Pablo Neruda; Rayuela, de Julio Cortázar y Altazor, de Vicente Huidobro.
¿Cuánto tiempo te llevó escribir el libro?
Alrededor de un año y medio. A veces escribía un poema y podía tardar un par de meses en que llegara el otro. Hubo temporadas en las que trabajé más y otras en las que me di pausas.
¿Dónde se puede conseguir?
De momento no puede encontrarse en librerías. Pronto estará disponible en versión digital (solo necesito terminar de ver un par de detalles sobre la distribución). Calculo que se podrá adquirir en un mes aproximadamente, y si alguien está interesado solo debe escribir un correo a: antonioalonsocatalan@gmail.com.
Fotos: Lulú Urdapilleta