Álvaro Obregón nació un 19 de febrero de 1880 en Sonora fue un militar y político mexicano que tuvo un papel importante y clave en el movimiento armando de la Revolución Mexicana. Fue asesinado el 17 de julio de 1928.
Su padre falleció cuando Obregón tenía un año de edad y su mamá lo dejó a cargo de sus hermanas. Se sabe que en su infancia aprendió carpintería e incursionó en las artes poéticas y musicales.
En 1906 conoció a su primera esposa, quien lamentablemente falleció junto con sus gemelos al darlos a luz. Despues de dos años, pidió a sus hermanas que cuidaran a sus otros hijos mientras él se enlistaba a las fuerzas militares de Francisco I.Madero para luchar contra el gobierno de Porfirio y así derrotarlo. Su vida es importante para la historia de la Ciudad de México, tanto porque gobernó el país desde la capital como por su sorpresiva muerte en San Ángel. Por eso recordamos sus pasos en la ciudad chilanga.
En 1910 viajó a la Ciudad de México a los festejos centenario del inicio de la Independencia nacional, en donde dejó una ofrenda en la Columna a la Independencia. Estos festejos tenían como objetivo mostrar ante los demás países que México era una nación importante, progresista y confiable. En 1912 se une a la Revolución Mexicana y tras varias luchas es ascendido a General de División. El 15 de agosto de 1914 entra a la Ciudad de México prohibiendo la venta de bebidas alcohólicas e imponiendo pena de muerte a todo aquel que altere el orden público.
En 1919 se lanzó como candidato oficial a la presidencia. En su discurso señaló la importancia y necesidad de tener un gobierno que pusiera en práctica las corrientes liberales para que el país pudiera crecer. El 1 de diciembre de 1920 es declarado presidente. Su mandato tuvo como prioridad pacificar al país y reincorporación de José Vasconcelos, quien había sido ministro de Instrucción Pública, cuya antigua institución educativa renació en 1921 con el nombre de Secretaría de Educación Pública (SEP).
En 1925 abanderó a la delegación Mexicana para los juegos olímpicos que se realizarían en París, en donde la Junta General de Delegados decidió que los I Juegos Centroamericanos y del Caribe se realizaran en la Ciudad de México, este evento, sin saberlo, fue un preámbulo para las Olimpiadas de 1968 realizadas en la CDMX. Al término de su presidencia decide regresar a Sonora y retirarse de la vida política, pero eso duró muy poco, ya que en 1928 regresa a la vida política anunciando una nueva contienda a la presidencia, la cual ganó. Había muchos rumores sobre un posible atentando, lo que hizo que se revisara minuciosamente su agenda.
El 17 de julio de 1928 es invitado a comer con diputados federales al restaurante La Bombilla en San Ángel. Se dice que este restaurante era uno de los favoritos de Obregón, ya que le gustaba la comida y postres que preparaban ahí. A su llegada al restaurante se tomó una foto con los diputados, tras iniciar la comida fue interceptado por León Toral, quien le quería mostrar su block de dibujos, al voltear a verlos, Toral disparó a su rostro, fueron 12 disparos los que le dieron en la cara de Álavaro Obregón, quien murió al instante.
Todos en el lugar se lanzaron contra León Toral, quien declaró cumplir con la misión de Dios de matar a Obregón para que el país viviera en Paz y Justicia, para que “Cristo pudiera reinar en México”. Así terminó la vida de Álvaro Obregón quien, se dice, tenía un humor carismático que marcó huella de quien lo conociera, además marcó una línea importante en la historia de nuestro país.