Cuando el artista plástico Vicente Rojo visitaba al escritor Carlos Monsiváis en su casa, agarraba cualquier papel, servilleta o tarjeta postal que tuviera a la mano y empezaba a garrapatear ocurrencias. Por ejemplo, hacía un autorretrato, pero se ponía a sí mismo con cuerpo de gato, o le dejaba alguna frase llena de humor. A veces no sólo rayaba in situ, sino que le mandaba libros de artistas consagrados totalmente intervenidos con bromas y caricaturas. Por eso Rafael Barajas El Fisgón, amigo de ambos, dijo que era un “monero privado”: una especie de profesión secreta paralela a su trabajo público como artista plástico, escultor y diseñador gráfico.
Después de la muerte de Monsiváis, Rojo se topó con la sorpresa de que el gran cronista de la ciudad había guardado cada uno de aquellos dibujitos, frases, cuadernos y libros. Así que él y El Fisgón se dieron a la tarea de retroceder en el tiempo y reunir todo ese material, clasificarlo y exponerlo en una muestra llamada ‘Aforismos y grafismos’, que ahora mismo cuelga de las paredes del Museo del Estanquillo.
A través de 120 piezas, es posible revivir grandes momentos de esta convivencia que se extiende de 1960 a 2010, entre tres artistas que, más allá de trabajar juntos, se divertían y eran amigos.
Aforismos y grafismos.
Hasta 13 de abril 2015.
Museo del Estanquillo. Isabel la Católica 26, Centro Histórico.
Miércoles a lunes de 10 a 18 h.
Entrada libre.
(Aretha Romero)