En las últimas semanas han crecido los rumores acerca de un automóvil fabricado por Apple, consecuencia de reportes de avistamientos de un vehículo con sensores adicionales a los que usa la compañía con el propósito de recolectar información para sus mapas, muy cerca de su sede en Cupertino, California.
Hace poco más de dos años se hablaba de reuniones entre Elon Musk, inventor y dueño de la empresa de automóviles eléctricos Tesla Motors, con el CEO de Apple, Tim Cook; pero al parecer no se concretó una colaboración: el diario Wall Street Journal publicó la semana pasada que alrededor de mil personas (un equipo encabezado por Steve Zadesky, quien fue ingeniero de Ford, y Johann Jungwirth, antiguo encargado de desarrollo e investigación en Mercedes-Benz) estaban trabajando en el proyecto Titan para crear un carro de la marca de la manzana.
El Apple Car es prácticamente considerado un hecho y queda sólo la incógnita de si se manejará de forma autónoma o no, al menos en su primera versión. Lo que ya se asegura es que tendría una pantalla táctil con la que se tendría acceso al software que ya ha desarrollado Apple para su uso en otras marcas automotríces, así como asistencia en el frenado ante una colisión inminente y la capacidad para mantenerse en un carril.
Por su parte, Google también tiene software y ha realizado demostraciones de Google Car, pero la ventaja que podría tener Apple, además de la facilidad de uso, es en el diseño: tal y como se ha comprobado con sus otros dispositivos. Me imagino una minivan con acabados de aluminio similares a los de una MacBook.
En fin, apenas va un año de trabajo, pero un factor fundamental será la batería: no quisiera quedarme sin pila a medio Periférico.
(El Paella / @elpaella9)