De ser un proyecto que databa de la época virreinal, el Archivo General de la Nación hoy resguarda y permite el acceso a su acervo en el Palacio de Lecumberri, penal que en su tiempo fuera uno de los más temidos de América Latina
En 1790, se fundó el Archivo General de la Nación por iniciativa de Juan Vicente Güemes Pacheco y Padilla, segundo conde de Revillagigedo. El objetivo era establecer un nuevo orden en la documentación que poseía la Secretaría de Cámara del Virreinato. El Archivo tomó auge por el nuevo orden implementado tras la consumación de la Independencia.
Durante las décadas de agitación histórica por las que México atravesó en el siglo XIX y hasta el periodo revolucionario, el acervo del Archivo fue resguardado en distintos sitios y su ubicación pasó de Palacio Nacional al Palacio de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas. Hace cuatro décadas se tomó la decisión de convertir la antigua prisión de Lecumberri en su nueva sede.
En 1900 se fundó el Palacio Negro y su objetivo fue albergar una penitenciaria. Su construcción retoma el concepto de panóptico, cuya arquitectura circular permitía vigilar toda la construcción desde su centro. Entre los personajes que estuvieron presos ahí, se encuentran David Alfaro Siqueiros, José Revueltas y Juan Gabriel.