Ya conocía Sole, Raw & Oyster Bar y me encantaba. Jamás hubiera imaginado que un lugar de ostras y comida del mar tendría una burger en su menú. Pero ahí, en medio de otras delicias carnívoras y marisqueras, estaba la Hamburguesa Sole: 250 gramos de una combinación secreta de carnes Angus, foie gras, arúgula, tomate, mostaza de Dijon y queso Grana Padano. Sonaba apetecible. No pude resistir y regresé exclusivamente para probarla.
Me senté y ordené. Pasadita de medio, al punto, para que no hubiera sorpresas y como para que estuviera un poco más consistente. Tardó un poquito, pero cuando finalmente llegó, me sacó una sonrisa. El pan, propio, con la consistencia necesaria para aguantar el pattie de carne. Abundante arúgula y foie. Un poquito de catsup solo por costumbre y venga. Primera mordida y delicioso. Le siguieron varios buenos embates y, con cada uno, la mezcla de sabores crecía. Me resultó curioso que, con todo y con que junto a la carne había sabores intensos, no se perdía el de la hamburguesa. Ese es uno de los meollos del asunto: una hamburguesa debe de saber, ante todo, a hamburguesa, no a los ingredientes que la acompañan.
Me encanta la idea de que las hamburguesas aparezcan en los lugares menos esperados. Uno entra a un restaurante y la sorpresa de encontrar una gran hamburguesa le hace el día a cualquiera. Me gusta que, aunque de primera instancia parece de señor, el restaurante y, sobre todo su burger y algunos elementos del menú, no lo son. Son más de adulto joven, por decirlo de algún modo. Me fui, esa tarde después de comer, con una gran sonrisa a pasear por la colonia Juárez.
Contacto: @solemexico_
Dirección: General Prim 95, col Juárez
Horarios: Mar a sáb, de 13 a 2 h Dom a lun, de 13 a 18 h
Consumo promedio por persona: $300
Fotos: Especiales