Fue la primera mujer en lograrlo. En 2015, la nominaron al Emmy en la categoría Personalidad en programas deportivos de habla hispana. Cuando se lo dijeron sintió que, al fin, había conseguido colarse. “Los otros nominados eran hombres mayores, de muchísima trayectoria y yo sentía que había roto algo”, cuenta. Muy pocas veces sucedía algo así en su medio: en el periodismo deportivo, ser mujer suele ser un verdadero obstáculo.
Más de un chilango la ha visto en televisión, espectaculares o redes sociales. Cabello rubio, facciones finísimas y el cuerpo atlético, Marion Reimers entró a Fox Sports como reportera en 2006 y, desde hace cinco años, es una de las conductoras estelares. No es sorpresa: tiene una maestría en periodismo, habla cuatro idiomas y ha cubierto juegos olímpicos, copas mundiales y juegos panamericanos. Aun así, en internet no para de recibir insultos: en el imaginario popular, los deportes son cosa de hombres.
Les comparto mi primera columna en @VolcanicaN sobre el escándalo en la gimnasia estadounidense:https://t.co/QTPzlMbiVy
— Lady Reimers (@LaReimers) November 29, 2017
Fue esto —el sexismo tan cotidiano en las redes sociales y en el medio deportivo— lo que llevó a Marion a crear Versus, en conjunto con la periodista Gisela Pérez. Se trata de una asociación civil que busca, en primera instancia, desarticular la idea de que el deporte no es para las mujeres. Los objetivos son ambiciosos: trabajar con especialistas para lograr contenidos más inclusivos, otorgar becas para facilitar que las mujeres incursionen en el periodismo deportivo y crear una asamblea para monitorear las principales problemáticas.
Marion conoce a la perfección el acoso, desde hace ya mucho tiempo. “Existe un acosador que me sigue desde hace 10 años y me ha agredido físicamente. Una vez fui a levantar un acta a la delegación y se me informó que, como no tenía daño físico visible y era un tema de internet, no sería fácil proceder. Se me preguntó si no lo conocía, si en realidad no teníamos una relación, si no lo había provocado. Me pusieron en una misma habitación con él”.
