— COMER —
BUENOS HERMANOS
Sobre la vía del tren de la Avenida Inglaterra –que cuando pasa hasta las copas brindan solas– y rodeado de una zona industrial desangelada, están dos de los lugares que no te puedes perder. Son hermanos, el mayor se llama i Latina y el menor Anita Li. La decoración es una creativa mezcla entre lo kitsch y lo regional, entre lo glamoroso y lo provinciano. Y de la carta: lo que sea, en serio. De la i Latina un cebiche de almeja, un solomillo o una hamburguesa. De Anita Li debes probar el tiradito de pulpo, el ‘Chicha-roll’ (un sushi mexa) o el ‘Patito pa´taquear’. También prueba los ‘Camarones Anaheim’, servidos con curry y leche de coco, o el pescado ‘Yucathai’.
I Latina: Av. Inglaterra 3128, Vallarta Poniente; 3647-7774. Martes a Sábado de 19:30 a 1 h. Domingo de 13:30 pm a 18.
Anita Li: Av. Inglaterra 3100, Vallarta Poniente; 3647-4757. Lunes a jueves de 13:30 a 18 h. Viernes y sábado de 13:30 a 1 h.
MARISCO FRESCO
La oferta marisquera de Guadalajara es sorprendentemente buena y uno de los mejores lugares es El Negro (aunque su nombre oficial es Ponte Trucha Negro). Aquí circulan las cervezas y las micheladas y los aguachiles y las tortitas ahogadas de camarón y los medallones de marlín y los cebiches que iluminan la oscuridad de la cruda. Los nombres de los platillos tienen ese ingenio característico del puerto de Mazatlán: ‘La Gran Chingadera’, un combo de camarón, pulpo, ostión, callo, caracol, pata y calamar; ‘La Torta Viagra’, que además de los bichos enlistados anteriormente lleva marlín; ‘La Grúa’, un un consomé de camarón; o el ‘Vale Madre’, camarones a la diabla, naranja, ajo, pulpo y filete.
Ponte Trucha Negro: Francisco Zarco 779, Santa Teresita; 3825-7380.
UN POCO DE TRADICIÓN
Cebollitas, rabanitos, perejil, abundante tocino, un jugo de carne perfectamente sazonado y, obviamente, la carne suave y deliciosa. Eso llega a tu mesa del Kamilos 333. El lugar es de adobe, las mesas de madera, la decoración muy mexicana, el servicio siempre amable y los frijoles… ¡los frijoles son un pecado! Te los llevan junto con las bebidas, para abrir boca, y si no te importa que te acusen de tragón o que te bailen merengue en el estómago, pide otros. El Kamilos está al lado de las famosas Karnes Garibaldi, que tienen el Récord Guinness en rapidez del servicio, pero mejor disfruta con calma aquí. Además de la carne en su jugo, puedes pedir una arrachera, un t-bone o un filete, escritos en la carta con faltas de ortografía, pero a la barriga no le importa la RAE.
Kamilos 333: Clemente Orozco 333, Santa Teresita; 3825 7869.
**************************
— BEBER —
Si no tiene remedio: un litro y medio
Cuando se puso de moda beber mezcal y ponerse hipel en Guadalajara, abrió en un local por el que no dabas tres pesos. Sin embargo, su barra era perfecta para perder la cabeza, su pista ideal para sacudir la cadera y su lema fue imán de los mártires de la noche: Pare de sufrir, tome mezcal. La música siempre es guapachosa, el ambiente es un caldo y salir derechito sin estamparse en la puerta se vuelve un reto. Puedes mitigar el alcohol con cacahuates o un tamal oaxaqueño, pero si eres chilango no creemos que necesites otro rico y delicioso tamal oaxaqueño, ¿o sí?
Pare de Sufrir: Argentina 66, entre Vallarta y López Cotilla. Jueves a sábado de 21 a 3 h.
La Cantina de la bicicleta
La Fuente es una de las cantinas más viejas de la ciudad. Dicen que un ferrocarrilero que llegó tomado pasó al baño y olvidó su bicicleta, desde entonces el oxidado cacharro es la identidad del lugar. Puedes caer en la tarde después de pasear por el centro, pedir unas cervezas o unos tequilas. Instálate en la vieja barra con algún parroquiano que te contará historias o en alguna de las mesas si vas en bola. El ambiente es completamente cantinero y si te da hambre puedes comprarle botanas a las marchantas.
La Fuente: Pino Suárez 78, Centro Histórico. Lunes a sábado, 12 a 12 h.
La crema de la perla
Para una noche bohemia y ligues intelectuales, ve a Bajo Fondo. Está ubicado en el sótano del restaurante La Matera –que, por cierto, es un gran lugar para carnívoros–. Su cava, que además es una obra de arte, está muy bien nutrida. Como el ambiente es cachondón y la iluminación es tenue, puede que un whisky en las rocas se vea muy bien en tus manos, sobre todo si quieres conquistar a alguien. Si te da hambre y te cierran La Matera, pide unas tapas o unas papitas de gajo.
Bajo Fondo: Av. México 2891 esq. Nelson, Vallarta Norte. 3616 626. Martes a Sábado, 18 a 2 h.
— DORMIR —
Para mochileros
Es un hostal hippie, una opción muy digna si no te importa compartir un cuarto. Es barato, está limpio, tiene una ubicación muy céntrica para salir a cenar o por unos tragos sin necesidad de un taxi y los espacios son muy agradables. Aquí encontrarás viajeros de muchas partes del mundo. Tiene un bonito jardín, sólo no te sorprendas si de pronto te llega un aroma a petate.
Hospedarte: Efraín González Luna 2075, Americana. Reservaciones: 3615 4957. www.hospedartehostels.com.
Un lujito
Si buscas un hotel cómodo, bonito y bien ubicado, Casa Madonna es una opción muy elegante. El edificio fue diseñado por el arquitecto Ignacio Díaz Morales –que fue una eminencia tapatía– y remodelado para comodidad del viajero. Tiene 13 habitaciones de diferentes tamaños, patios, bar y ricos desayunos. Está prácticamente al lado de donde más efervescente es la vida nocturna en Guadalajara, así que puedes regresar en zig-zag sin correr riesgos.
Hotel Casa Madonna: Av. La Paz 2275, Americana. Reservaciones: 3615 6554. www.casamadonna.com.mx
El más viejo de la ciudad
El edificio es una joya colonial, tiene 64 habitaciones y en su restaurante puedes comer las delicias de Jalisco. Está bien ubicado, sobre todo si te dan ganas de pasear por el Centro Histórico. Sólo recuerda pedir una de las habitaciones de enfrente, del edificio original, porque atrás tiene un anexo medio feo.
Hotel Francés: Maestranza 35, Centro. Reservaciones: 3613 1190. hotelfrances.com.mx