De entrada, el edificio es impresionante: una construcción afrancesada que ha sobrevivido al paso de los años y la depredación inmobiliaria. Por eso da tanto gusto verla activa. Los locales de la planta baja están abiertos y, en el segundo piso, está este negocio: Cusí. En el mismo salón ya hubo un café antes, el Don Porfirio (que ahora está en Plaza de la República), pero la decoración no era tan linda. Cusí, con muebles eclécticos, una minibiblioteca y un gran mural de la artista sinaloense Fusca, es tan hermoso que dan ganas de que distraer a los empleados y quedarse a vivir ahí como La Pícara Soñadora.
La especialidad son las bebidas: el café es muy bueno y, para los conocedores, tienen diferentes métodos de extracción. También hay tés, tisanas y unos frappés buenísimos; a nosotros nos gusta el de vainilla con maracuyá y el de fresa con albahaca. La comida está muy rica. Durante todo el día sirven desayunos, así que a las 5 de la tarde, ¿por qué no?, te puedes echar unos chilaquiles con salsa de habanero y cacahuate (nuestros favoritos) o unas enchiladas verdes con hoja santa y, de postre, unos hot cakes con tocino. Además hay quiches, omelettes, crepas, ensaladas, pastas y hamburguesas.
El servicio es leeeeento y es común que se hagan bolas con tu orden, pero se les perdona porque son muy amables y buena onda. Además, lo suyo, lo suyo, es el teatro: originalmente, el espacio fue tomado por un grupo que quería desarrollar proyectos escénicos. El café es un “plus” que se les ocurrió después. También hay talleres y otras actividades variaditas. Puedes consultar la cartelera en su Facebook.
Cusí
Gómez Farías 41 loc. A, esquina Sadi Carnot, San Rafael; 5535 2046.
Lunes a sábado de 7 a 22 h.
FB: Cusi.Cafeteria
(Tamara De Anda)
