Solamente por su rol como delantero de Blur, Damon Albarn tiene su lugar asegurado en los libros de historia del rock.
Sin embargo su currículo no se reduce a lo hecho dentro de este cuarteto emblema del brit pop. Aprovechó una larga pausa en la vida del grupo para crear el exitosísimo Gorillaz, hacer bandas sonoras para películas, componer un par de óperas y grabar algunos discos con músicos africanos.
Ahora, en este 2014, finalmente ha decidido publicar un disco bajo su propio nombre. Así explicó su decisión, hace unas semanas, en entrevista con Evaristo Corona de la estación radiofónica Reactor 105: “Éste es, más o menos, mi disco número 23. Estaba trabajando con Richard Russell —mandamás del sello XL Recordings—, quien lo produjo. Estábamos terminando un álbum de Bobby Womack y queríamos seguir trabajando juntos. Comenzamos a jugar con ciertas ideas ¿haremos otro grupo? Se nos ocurrieron algunos nombres tontos y nos preguntamos ¿realmente queremos comenzar de nuevo de esa forma? Porque empezar con un nombre nuevo es mucho trabajo. Fue su idea. Volteó y me dijo: ‘Quiero producirte, me gustaría producir un disco bajo tu nombre’. Supongo que era el momento para hacerlo y así fue como empezó”.
El resultado son 13 piezas en las que hay pocos rastros de brit pop. Las influencias más notables son las cosas en las que Damon Albarn se ha mostrado interesado desde hace más de una década: el hip hop, la música de África y el folk. Una obra elegante, intima, de esas que hacen buena compañía.
Damon Albarn/ Everyday Robots/29 de abril del 2014
(Rulo / @ruleiro)