FOTO: CORTESÍA WARNER BROS. ENTERTAINMENT INC.

24 de abril 2025
Por: Redacción

Bromance de acción

Hay muy pocas películas en la que dos actores con fuertes personalidades logran congeniar. El contador 2 lo logró de forma impecable

Por Karla Peckerman*

Nueve añotes tuvieron que pasar para que El contador 2 llegara a la pantalla grande. Dirigida de nuevo por Gavin O’Connor, la secuela nos regala mucha acción y una inesperada química entre Ben Affleck y Jon Bernthal.

Estrenada en 2016, El contador nos presentó a Christian Wolff (Affleck), un hombre con autismo y habilidades matemáticas excepcionales que trabajaba como contador. Sin embargo, detrás de esa fachada había también una persona letal que lavaba dinero para algunas de las organizaciones criminales más peligrosas del mundo.

A lo largo de la cinta, vemos cómo Christian crece sorteando las vicisitudes de su autismo hasta convertirse en el hombre que es. En el camino conocemos a Braxton (Jon Bernthal), su hermano menor y quien se ve inmiscuido en los asuntos de Chris.

En esa primera parte, pudimos darnos una idea del tipo de relación que este par tenía, pero es hasta esta segunda entrega que la relación de hermanos tiene un desarrollo más profundo y que da como resultado uno de los mejores bromances del cine.

La química entre los actores es tan real que traspasa a sus personajes, lo que nos lleva a preguntarnos… ¿cómo lo lograron? En entrevista con Chilango, Ben Affleck y Jon Bernthal nos contaron cuál fue el secreto para que se diera esa inesperada complicidad.

“No es porque Ben está sentado aquí, pero él realmente es un héroe para mí y qué alegría trabajar con uno de tus auténticos héroes y forjar una verdadera amistad. Lo quiero mucho y lo admiro. Ha habido otras personas a las que realmente he querido y admirado, pero no encuentras química fácilmente.

Creo que es un testimonio de lo abierto que es Ben. Es tan fácil improvisar con él, está abierto a cualquier cosa. No tuvimos la oportunidad de hacer eso en la primera película y creo que simplemente sucedió de forma natural. Así que estoy superagradecido por ello”, reveló Bernthal.

Esto nos hace pensar que el secreto de la conexión es la admiración mutua entre los actores, hipótesis que confirmó Affleck en un muy fluido español.

“La cosa más interesante para mí fue la relación entre aquellos hermanos, es la cosa más poderosa en esta película. Puedes tener una película con grandes escenas de acción y grandes luchas, a mí me encantan, pero como actor tienes mucha suerte si tienes la oportunidad de conocer a alguien como él (Jon). Es un hombre magnífico y lo mismo como artista”, dijo el actor.

El contador es a la fecha una de las grandes películas de acción de la década pasada, así que aventurarse a hacer una secuela, sobre todo después de tantos años, parecería arriesgado. Sin embargo, ambos actores tuvieron buenas razones para aceptar el reto.

“Para mí simplemente se trata de la gente con la que trabajas. Estaban Ben, Gavin (O’Connor) y Bill (Dubuque). Ni siquiera se cuestiona. Nadie se mete más en problemas que Gavin. Le ha dado vueltas a cada momento, a cada detalle de cada relación, incluso a algunos personajes secundarios. Así que creo que ni siquiera lo consideré, fue un ‘por supuesto que quiero estar ahí'”, reveló el actor, quien también ha dado vida a The Punisher.

Ben Affleck, por su parte, reflexiona sobre lo que para él era el punto central de la historia más allá de la acción y lo que más le gustó de regresar a este proyecto.

“En este caso, se trata de dos hombres que intentan conectar entre sí, que se aman, tienen dificultades para formar relaciones y se sienten fundamentalmente solos. Creo que la historia es muy conmovedora y universal, y sospecho que muy pocos de nosotros nos hemos sentido solos, alienados y frustrados por nuestra incapacidad de conectar con las personas que amamos y que nos aman. Para mí eso es lo interesante, sea cuál sea el género que hagas”, aseguró el actor.

El contador 2 logra atraparnos de nuevo con su historia, las actuaciones, las grandes escenas de acción y la química de sus protagonistas, al grado de dejarnos con ganas de más.

*Texto adaptado para Chilango Diario

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