El autodenominado “fin de semana más barato del año” sigue en plazas comerciales, supermercados y tiendas departamentales, por lo que necesitarás abordarlo con “mentalidad de tiburón” para que su ola de promociones no te lleve a ti
Momentos como el Buen Fin despiertan el instinto comprador, más al enfrentarse a las tiendas retail, esos lugares que ofrecen productos (normalmente creados por otras empresas) en venta minorista. Los mayores ejemplos de este sector son las tiendas de autoservicio, departamentales y supermercados; aunque no por ello quedan fuera farmacias, jugueterías, mueblerías y otras más.
Cuando acudes a estos negocios en Buen Fin, sus ofertas suelen ser muy atractivas. Los descuentos y las formas de pago llaman tu atención tanto en sus sedes físicas como en sus portales web. Sin embargo, para aprovechar al máximo este evento anual, es crucial abordarlo con mente fría, pues el objetivo es realizar compras inteligentes que garanticen una adquisición sabia y no una decepción o, peor, una monstruosa deuda.
Combate al devorador de tu cartera
Si eres honestx contigo, sabrás que las promociones engañosas no siempre son el enemigo, sino tú mismx. Te gusta esto o aquello, y por ello puedes dejar de lado el pensar si te conviene o no, si de verdad lo necesitas.
Así que antes de sumergirte en las compras, arma un presupuesto claro y realista. Define límites financieros con base en cuánto puedes reservar para compras sin comprometer tus gastos diarios y actuales deudas, y asigna montos específicos a categorías como electrónicos, ropa o electrodomésticos.
También no te vayas con lo primero que veas. Antes de decidirte por una tienda en especial, compara precios en diferentes lugares, conoce las políticas de devolución y lee reseñas de productos. Lo mejor de las plataformas en línea y aplicaciones móviles es que ofrecen herramientas útiles para rastrear descuentos y comparar precios en tiempo real.
¡Aplícalos! Sólo verifica que te encuentras en el portal oficial del negocio; para ello te puede servir la herramienta Monitoreo de Tiendas Virtuales de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), que encuentras en: www.profeco.gob.mx/tiendasvirtuales.
Y si bien tendrás una lista de lo que quieres, sabes que hay productos o servicios que son prioridad. Todo sea por ahorrar y no padecerla después. Crea una lista, evita compras impulsivas y garantiza el enfoque en lo esencial. Esto te asegura que cada adquisición sea relevante y útil. Puedes comenzar con pensar en el largo plazo, es decir, evalúa artículos de uso cotidiano que podrían necesitar reemplazo en los próximos meses o que tendrán uso de larga duración (como los electrodomésticos) y aprovecha sus descuentos; así maximizas beneficios.
En el mar de ofertas, elige la mejor
Te podrán encantar esos letreros que te ofrecen distintos plazos sin intereses o que buscan devolver una cierta cantidad de dinero tras tu compra. Pero no hay nada como la calculadora (sea clásica o en tu smartphone) para saber si de verdad te conviene. Antes de pasar tarjeta o sacar efectivo, calcula. Puede que la promoción sólo te esté obligando a llevarte más producto del que necesitas o que lo que recibirás de ahorro sea muy poco.
En el caso de los plazos, se recomienda elegir la menor cantidad de meses o quincenas porque, con el tiempo, pagar se puede volver pesado. Aun así, mejor sumar si te será posible cubrir cantidades altas sin comprometer tus demás gastos.
Hablando de plazos, también vale la pena revisar las formas de pago. Actualmente ya no se trata sólo de utilizar un plástico o dinero físico, pues muchos negocios permiten transferencias, pagos con código QR y hasta existen nuevas empresas que te dan facilidades. Muchas de estas últimas pueden llegar a tener descuentos extra perfectamente combinables con otras promociones en tiendas retail. Más vale que revises hasta las apps de tus bancos o estas alternativas para aprovechar opciones, siempre confirmando que sean auténticas.
Dale un final feliz a tus compras
Una vez que termines de adquirir todo lo necesario, nuevamente haz cuentas y apunta todo lo necesario. Revisa y calendariza para que no se te pase ningún plazo. Además, aunque ya hayas revisado tus tickets antes de salir de tienda, vuelve a hacerlo en casa, saca copias y guarda los comprobantes, sobre todo si se tratan de dispositivos electrónicos, por si surge algún desperfecto.
Al final, disfruta. También se trata de que te sientas satisfecho por haber sobrevivido al feroz pero increíble mar del Buen Fin.