¿Más velocidad o más ahorro? Sin importar lo que busques, si uno o ambos, es importante que revises el desplazamiento del motor que tendrá tu próximo vehículo para hacer la mejor compra

La cilindrada es la capacidad que tiene el motor para dar potencia a un automóvil a partir del combustible que consume. La forma en que esto funciona, básicamente, es que los cilindros que contiene un motor trabajan con una mezcla de combustible y aire para crear presión en los pistones y así ayudar al vehículo a ponerse en movimiento; con lo cual, a mayor desplazamiento de la mezcla, se genera un mayor torque y rendimiento, pero también habría un aumento en el gasto de gasolina. 

Así, más allá del modelo de tus sueños, debes fijarte en sus especificaciones para que coincidan con tus necesidades. Actualmente, el formato más comercial es de cuatro cilindros, debido a que en la ciudad no se requieren alcanzar grandes velocidades. Si conducirás para cubrir actividades cotidianas, te conviene optar por eficiencia y no rebasar esa cantidad, o incluso considerar un tricilíndrico. Pero si tienes gusto por los autos de lujo, considera que pueden llegan a poseer seis o más con motores premium. 

Ahora, cuando se habla de la cilindrada, se puede hallar la abreviatura “cc”, que significa “centímetro cúbico”. La misma está ligada a los litros debido a que 1,000 centímetros cúbicos equivalen a uno, pero hay una ligera diferencia. Hay otro número que indica litros y, con ello, cuánta gasolina se “inyecta” al motor (por ejemplo, 1.2). Este también debe ser tomado en cuenta, porque puede tener un auto con cuatro o seis cilindros y la misma cantidad de inyección, que influirá en su desempeño y tu bolsillo.

Otro detalle: la disposición

Con más cilindros, la forma de distribución varía y también representa un cambio. Los cilindros en línea se presentan en números de seis para abajo por ser un estilo más económico y fácil de instalar; mientras que la distribución en V, por ocupar un espacio más pequeño y disminuir la vibración, también da más beneficios en potencia y hasta en ruido. También hay disposición en bóxer u opuestos, que son menos convencionales.