Construido durante la época del Porfiriato, antes de ser uno de los hoteles más emblemáticos de toda la ciudad, fue una de las primeras tiendas departamentales que abrieron sus puertas al público en todo el continente
Fue una de las primeras y más importantes tiendas departamentales que hubo en todo el continente, y su construcción fue impulsada por Porfirio Díaz, quien era un amante de la cultura francesa y a quien debemos la estética de colonias como la Juárez o la Roma. En 1968, el edificio abrió sus puertas al público como hotel.
Ubicado en el número 82 de la avenida 16 de Septiembre, este hotel no sólo es una de las edificaciones más emblemáticas del Centro Histórico, sino de toda la capital. El proceso de construcción duró cuatro años (de 1895 a 1899) y el diseño de sus interiores tuvo un enfoque, de forma deliberada, hacia el Art Nouveau.
La estructura se desgastó con el tiempo. De 2003 a 2005 se remodeló y, al terminar los trabajos, el inmueble fue rebautizado como el Gran Hotel Ciudad de México. Al abrir sus puertas, contó con 60 habitaciones, la mitad de las que llegó a tener hace varias décadas. Son célebres las visitas de artistas como Agustín Lara y Cantinflas.