La Ciudad de México genera el 37% de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE) del país, de acuerdo con el INECC
Entre los tipos de residuos propios de la época moderna, están los aparatos eléctricos y electrónicos, de los que tan sólo en 2014 se generaron 358 mil toneladas en México, es decir, 3.2 kilogramos per cápita, de acuerdo con el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
La estimación más reciente para la Zona Metropolitana del Valle de México, no obstante, es de 4.7 kilogramos per cápita, con 112 mil 490 toneladas anuales de estos residuos, un 37% del total de electrónicos generados en el país. Mientras que a nivel mundial se generan alrededor de 40 millones de toneladas anualmente.
En 2010, por ejemplo, se generaron casi 3 millones de televisores, que representaron 65 mil 376 toneladas de residuos; casi un millón y medio de aparatos de sonido, con 7 mil 334 toneladas de RAEE; 5 millones 150 mil teléfonos celulares, con 515 toneladas de residuos, y un millón 901 mil computadoras, que al final del día generaron 38 mil toneladas.
Los aparatos electrónicos y eléctricos en desuso son peligrosos para la humanidad y el medio ambiente porque contienen compuestos y sustancias peligrosas, como metales pesados: Plomo [Pb], Cadmio [Cd], Mercurio [Hg], Cromo [Cr], Arsénico [As], Níquel [Ni], Cobre [Cu], Zinc [Zn] y Cobalto [Co].
Además de Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP´s), por ejemplo, Bifenilos Policlorados [PCBs], Cloruro de Polivinilo [PVC], Hidrocarburos Aromáticos Policíclicos [PAH]) y Polibromodifeniléteres [PBDE], entre otros. El 90% de estos residuos electrónicos, según el instituto, no es reciclado de manera adecuada, lo que representa un riesgo a la salud y al ambiente.
“El INECC estima que del total de residuos electrónicos generados en México, se recicla sólo el 10% de manera formal, mientras que un 40% permanece almacenado en casas habitación y bodegas. El otro 50% llega a estaciones de transferencia o a manos de recicladores informales (chatarreros), rellenos sanitarios o tiraderos no controlados”, señala la institución en su introducción al programa Reciclatrón, con el que el gobierno de la Ciudad de México promueve la entrega de estos residuos con el fin de darles un manejo adecuado.
En la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM), en donde se generan más de 13 millones de aparatos eléctricos y electrónicos al año, los consumidores desechan los equipos que ya no utilizan de la siguiente manera: 42% los entrega al camión de la basura, 30% los regala, 11% los almacena, y el 17% los vende.
De residuos a carcasas
Los materiales de los residuos que se recuperan en cada Reciclatrón son principalmente: tarjetas electrónicas, tubos de rayos catódicos (CRT), unidades de procesamiento de datos, monitores (LCD), equipo de cómputo, plásticos, electrodomésticos, metales ferrosos y no ferrosos. Con ellos se fabrican carcasas de nuevos aparatos electrónicos y eléctricos; válvulas de cobre, conductores eléctricos, cancelería de aluminio, perfiles, mallas de acero, clavos, entre otros.