La idea que surgió como una parodia a Emilia Pérez ahora es el cortometraje más aplaudido en México. ¿Ya lo viste?
Por Karla Peckerman*
Lo dijo y lo cumplió. Camila González, la mente maestra detrás del cortometraje más viral, no dejó su propuesta en un simple comentario en redes sociales, sino que la hizo y el resultado es Johanne Sacreblue: un filme muy francés.
Pero vámonos por partes… ¿Aún no sabes exactamente qué o quién es Johanne Sacreblue? Se trata de un cortometraje creado por la artista mexicana Camila Aurora González que surgió como una respuesta creativa, irreverente y reflexiva a la cinta Emilia Pérez.
La historia está ambientada en la “bella Francia”, protagonizada por personajes trans que desafían estereotipos y luchan contra el racismo sistémico con el arma más poderosa: el amor. Con mucha astucia y humor, Camila ridiculiza los clichés franceses al retratar a sus personajes con marineras, boinas y un dieta basada en baguettes y croissants.
Johanne Sacreblue: un filme muy francés se estrenó el 26 de enero y hasta este momento ya rebasa las 2.6 millones visualizaciones en YouTube, tiene calificación de 9.9 en IMDb y está luchando porque se le proyecte en salas de cine. En unos cuantos días se convirtió en todo un hito, pues logró lo que muy pocas cosas en este país: que gran parte de México se pusiera de acuerdo.
Después del inesperado éxito y el caluroso recibimiento, el siguiente paso para Camila y todo el equipo involucrado es convertirlo en un largometraje. “Esto lo hago porque quiero que la conversación que está generando Johanne Sacreblue se extienda hasta el 2 de marzo que son los Oscar. Porque mientras los Oscar suceden, Emilia Pérez va a seguir viva. Entonces sí me gustaría que la conversación sobre Johanne Sacreblue no se apague”, reveló la directora del filme a Chilango.
Con premura, pero bien hecho
Todo esto que te contamos es sólo un poco de lo que hay delante del proyecto, pero detrás hay muchas otras cosas que la misma Camila González nos contó en entrevista. La motivación de la joven creadora para aventurarse a hacer el corto fue definitivamente el público y el “mame” que surgió entre ella y sus seguidorxs respecto a la idea de hacer una película que retratara a Francia y sus clichés.
Ella plantó la idea y las personas fueron regándola con más ideas. Incluso fueron ellxs mismxs los que abrieron la página de recaudación para que Johanne Sacreblue dejara de ser una “broma” del internet y fuera una realidad.
A pesar de la respuesta positiva de donaciones, no se estaba llegando a la cantidad ideal para hacer el proyecto, sin embargo muchas personas ofrecieron su trabajo como donación. Es decir, que varios actores no cobraron por su participación, lo que compensó otros gastos.
Se quería que Johanne Sacreblue saliera el mismo día que Emilia Pérez se estrenó en México, pero la hazaña no era fácil. El 15 de enero se hicieron las audiciones y una vez seleccionado el elenco empezaron las grabaciones. Camila cuenta que en cuatro días no durmió más que cinco horas y aun así no lograron estrenar el 23, sino hasta unos días después.
Con todo, el resultado fue muy bueno, tanto que personas más allá de la comunidad de seguidorxs de Camila recibieron a Johanne Sacreblue de forma muy positiva.
Al día siguiente que el corto se publicó, Camila se sintió soñada al ver que tenía 20,000 vistas en YouTube. Creía que había logrado su objetivo y que tal vez en TikTok ganaría un poco más, pero sus expectativas fueron rebasadas. “Después ver que en las primeras 24 horas llegamos a 260,000 vistas, fuimos trending topic en México… ver que Vanity Fair Francia ya hizo un artículo sobre el corto y que hasta en Brasil la recibieron bien, me ha dejado impactada”.
Camila ahora busca poner al corto subtítulos en inglés y francés para llegar a otro público. También está en pláticas para que pueda proyectarse en cines y se convierta en un proyecto mucho más sólido. Ella se siente muy satisfecha con todo lo logrado con Johanne Sacreblue, a pesar de que no ha ganado ni un peso por ello.
- Más de 2.6 millones de visualizaciones tenía Johanne Sacreblue en YouTube hasta ayer, pero la plataforma no le ha permitido monetizar
*Texto adaptado para + Chilango diario